viernes, 13 de enero de 2023

El bebercio, en aquellos Sanfermines (1 de 3)

En Sanfermines hay gente devota y hasta de porrón
Iniciamos una serie de tres entradas sobre el bebercio en Sanfermines de la mano de Jaime Arguiñariz, camarero del Monasterio, entrevistado en 1976. Aprenderemos cosas tan sorprendentes como ésta:
"El 'Ay, Gabino, ay Gabino' lo sacaron tres hermanos de Lumbier, vivían fuera, pero en Sanfermines se juntaban los tres y llevaban un cartel que decía 'Lo de siempre: vino y chorizo'. Respondía perfectamente a la humilde realidad. No se comía otra cosa."
¡Y yo que pensaba que se le cantaba a Gabino con envidia!
Gabriel IMBULUZQUETA  DN 7 de julio de 1976.
"Ay Gabino, ay Gabino, cómo te vas .a poner". La historia del vino sanferminero, a una con los tiempos que corren, está dejando paso al 'boom" del champán y los combinados. Pero el vino sigue siendo, de alguna forma, el centro y la tradición del homenaje al Baco de cualquier cultura por antípoda que sea de la nuestra.
Que te ha pillau el carrico del helau
De los sanfermines todos sabemos un poco; unos más que otros, pero todos algo; todos sabemos de la emoción del encierro aunque no hayamos corrido nunca ni pensemos hacerlo; todos sabemos de noches en blanco, bien las hayamos vivido en el jolgorio de la calle o en el insomnio provocado por bombos y cornetas de plástico barato; todos sabemos de hechos estrafalarios, aunque siempre los protagonistas son otros; todos sabemos de bebidas y "carritos del helau"; todos sabemos entendernos con inglesas, suecas, turcas o vietnamitas, aunque a todas les soltemos un "very well fandango" y otras simplezas metiendo mil coces a la gramática inglesa y al diccionario.
Pero, por centrarnos en un tema, de bebidas, más que los bebedores, saben los camareros y "barmans".
Jaime Arguiñáriz

JAIME, historiador de la bebida en Sanfermines
J. Jaime Arguiñáriz, "Jaime", es quizá uno de los mejores historiadores de este matiz sanferminero con que cuenta Pamplona. Jaime, sesenta y un años y de Pamplona —faltaría más—, comenzó su trabajo profesional en el "Monas" el año cuarenta y cuatro. Y allí ha estado, San Fermín tras San Fermín, hasta hace tres años y medio en que se fue al "Xavier".

El primer bar de Pamplona
Uno, que es joven, piensa que bares ha habido siempre. Dentro de cincuenta años, los jóvenes pensarán que discotecas y "pubs" han existido de toda la vida. Sin embargo, Jaime, historiador de este aspecto de la ciudad, apunta con certeza:
—En el año treinta no había bares en Pamplona. Sólo había tabernas y cafés. Había también chacolís en muchos sitios, que exclusivamente servían chacolí y que sólo estaban, abiertos durante el tiempo de la cosecha del chacolí. 
Actuación musical en el Café Irañeta.
Años 50. Archivo Bar Baserri
El primer bar lo pusieron los hermanos Irañeta. Era el bar Irañeta, donde está ahora el Baserri. Estos hermanos, Juan, José, Bruno y Julio, vinieron de Argentina. Tenían una taberna en la calle Navarrería que se llamaba "Casa Irañeta". Antes a las tabernas se les llamaba "Casa tal" o "Casa cual". Al pasar en los años treinta a San Nicolás, pusieron el "Bar Irañeta". De los hermanos, Bruno era el que más fama tenía. Se marchó a abrir un bar a San Sebastián y allí se murió.
—¿Qué diferencia había entre taberna y bar?
—Por ejemplo, en el bar no se podía vender vino, salvo vino blanco, porque de ello se ocupaban las tabernas. Eran otros tiempos. Recuerdo haber pagado, de joven, el chato de vino veinte céntimos. Y hasta cinco céntimos he llegado a pagar.
—¿Cuándo se generalizaron los bares?
—A raíz de que los Irañeta abrieron el primero. Poco a poco muchos fueron cambiando los nombres.

Hace treinta años nacieron los fritos
En las tabernas no servían banderillas, al menos tal como las entendemos y encontramos ahora. Se podía pedir unas aceitunas o un taco de queso para acompañar al vino. Pero nada estaba sobre el mostrador a la vista del cliente.
Si quería, tenía que pedir.
—¿Cuándo nacieron las banderillas?
—Mientras no hubo bares no hubo banderillas. Los Irañeta, al abrir el bar, empezaron a poner banderillas en la barra, a la vista del cliente. Eran unas banderillas de huevo con chorizo y aceituna, banderillas de atún, etc., colocadas en unas bandejas. Al abrirse otros bares, por pura lógica, y por una simple razón de competencia, todos fueron poniendo banderillas.
—¿De dónde viene el nombre de banderilla?
—Yo creo que es por el palillo clavado en lo que se come, o porque el cliente clavaba palillos para coger.
—¿Los fritos?
—Nacieron en el "Monas" sobre el 45 ó 46. Fue la mujer de Federico Monasterio la primera que tuvo la idea de sacar fritos a la barra. El bar cogió fama por sus fritos de bacalao con tomate. Al igual que con las banderillas, rápidamente se extendieron los fritos por todos los bares.
Continúa en El bebercio, en aquellos Sanfermines (2 de 3)

Gabriel IMBULUZQUETA
DN 7 de julio de 1976

1 comentario:

Juan Manuel Apesteguía dijo...

Esta entrada de hoy me retrotrae a mis últimas años de mozo en Pamplona y de pensión encima de Juaristi y trabajando en BANESTO (Cortes de Navarra).
-Al Monasterio cercano siempre íbamos a celebrar cualquier acontecimiento; inolvidables los huevos y fritos empanaos. Muchos de los viajes a Pamplona, hospedado arriba, en el Europa.
- Al Irañeta a tomar el café y ver piernas.
Eran otros tiempos.
Un abrazo.