Un acordeón en el frente de Somosierra

En una página de Facebook se acaba de producir un desolvido precioso.

Alguien aporta la imagen de la izquierda con algunos datos y pregunta si alguien reconoce al acordeonista:

"1935, Olagüe (valle de Anué).

Un acordeonista, del que tan sólo conozco que se apellidaba Erviti, posa con su instrumento.

¿Alguien por aquí lo reconoce?"

Y Martin Urdanoz Erviti responde: "Es mi abuelo Martín Erviti, de Olagüe (Navarra). Estuvo con los Requetés en la guerra, en Somosierra. Luego mis abuelos fueron a vivir a Bilbao". 

Y, como prueba, sube una foto increíble de "La cámara en el macuto" (Pablo Larraz y Víctor Sierra) que en este libro aparece con la siguiente información:

Y que ahora se completa con el nombre del acordeonista requeté de Olagüe: Martín Erviti Guelbenzu.

Como se ve en la foto, a pesar del calor humano que transmiten las sonrisas y el apretón de manos, los granos de nieve en las boinas y capuchas de los soldados nos hablan de un frío espantoso que se evidencia aún más en esta imagen, también de Somosierra, a más de 2000 m. de altitud:

Requetés del Tercio de Santiago durante una ventisca en pico del Nevero, en Somosierra, a 2.210 metros de altura, el 8 de febrero de 1937. Foto Sebastián Taberna. ATB.

Frío espantoso que provoca estos comentarios en el libro de Pablo y Víctor:

"

La otra cara de la guerra:
"Requetés y Regulares en Venta Juanilla -
Somosierra", "Foto Ardanaz"

Aquí estoy sufriendo los rigores de la guerra, y las inclemencias del tiempo; ya hemos tenido tormentas y lluvias. Estoy bien, abrigado, solamente los pies, por el frío y la humedad, me molestan, pero he pedido a casa calcetines de lana recia. Tengo jersey, chaqueta de lana, capote y próximamente tendré tabardo, pues van a repartir a los requetés. Yo estoy muy bien. Unos días comemos bien, otros menos bien, y otros nos damos buenas palizas y además no comemos."

Carta de José María Erdozáin a su familia desde Navafría, el 24 de septiembre de 1936.

"Somosierra, un día de invierno, los requetés ateridos, embarrados, azotados por todas las inclemencias, y así todos los días. «Padre, esto... ni por España, solo por Dios puede sufrirse», me dice un requeté."

Carta del padre capuchino Mariano de Sangüesa. AHPCP.

Viernes, 17 de diciembre de 1937

"No he conocido en mi vida temporal más horrible: nieva, graniza, truena. Este tiempo parece pre-sagiar desgracias. Estoy inquieta por Teruel, es horrible pensar que combaten los pobres soldados hundidos en la nieve, agotados..."

Diario de Sylvia Baleztena.

Párrafo para enmarcar

Pero volvamos al mozo del acordeón, al abuelo de Martín Urdanoz Erviti. Y ahora en la hemeroteca de Diario de Navarra encontramos un párrafo para enmarcar, escrito 41 días antes de la visita del periodista y la propagandista:

DN 29/12/1936 Siempre queda inédita alguna escena de gran densidad emotiva. Se prepararon dos mesas cuyos manteles eran periódicos; se come, se habla y se lee. Mediada la cena apareció el sargento de requetés Erviti, de Olagüe, con su acordeón monumental. Chaho, el suletino, admirador de los carlistas de la primera guerra civil, se habría extasiado ante este acordeonista musculoso, fuerte, sano, impasible y picante: vasco desde su nariz hasta su epigrama rabelesiano. El primer tributo de su instrumento fué el vals de San Femín (Vals de Astráin) que fué coreado por el "riau riau". No faltó el "Oriamendi" ni la Marcha Real ni, por supuesto, "Rocío" (1) ni jotas con unas improvisaciones de Erviti que partían el corazón y en las que se revelaba la pasmosa facilidad asonante del versolari.

Montejurra'64

(1) Estoy convencido de que lo que interpretaron fue la versión carlista de "Rocío, ay mi Rocío" que se podría titular "Rosendo, ay mi Rosendo" (pincha). Si alguien nos pudiera ayudar a completarla... 
patximendiburu@gmail.com

Martín Erviti falleció en 1983, a los 80 años:

DN 29/10/1983 EL SEÑOR Don Martín Erviti Guelbenzu falleció el día 25 de octubre de 1 983 a los 80 años de edad, habiendo recibido los Santos Sacramentos y la Bendición Apostólica de Su Santidad. Su esposa, doña Josefa Ruiz; hijos, Ana María y Julia; hijos políticos, don Javier Urdánoz y. don Antonio Merino; hermana, Claudia; hermanos políticos, nietos, sobrinos, primos y demás familia, SUPLICAN UNA ORACION POR SU ALMA. Los funerales se celebrarán HOY, SABADO, día 29, a las OCHO de la tarde, en la iglesia parroquial de San Juan Bautista, de Olagüe