viernes, 30 de abril de 2021

Arozteguía, mal panorama

Recreación del proyecto de hotel en el Palacio de Arozteguia (a la derecha), junto al nuevo
edificio que será construido, el espacio de piscina y la zona verde de esparcimiento. Fotos: cedidas.

“Utilizar la coacción a los trabajadores y sabotear la maquinaria nos retrotrae a épocas de infausto recuerdo, de intimidación y violencia”

En plena década de los años 20, de este siglo XXI, nos encontramos de nuevo con los viejos métodos de las amenazas, el acoso y sabotaje, tan conocidos por estas tierras. Es la denuncia de los empresarios de la construcción por las obras del proyecto de Aroztegia, en Lecároz. 
Nadie está obligado a mostrarse de acuerdo con un proyecto que no le gusta, pero utilizar la coacción a los trabajadores y sabotear la maquinaria nos retrotrae a épocas de infausto recuerdo, de intimidación y violencia. 
En una sociedad democrática no existe hueco para la impunidad. Y las administraciones públicas -Ayuntamiento de Baztán, gobernado por Bildu, y Gobierno foral- no pueden ser ajenas a los ataques que están sufriendo los trabajadores de la empresa encargada de las obras de urbanización. Su responsabilidad es garantizar las obras y proteger a los trabajadores. 
Porque para dar cauce a la oposición está la ley y los tribunales. Nunca las amenazas y las agresiones.
Vista general del Palacio de Aroztegia, en Lekaroz.CEDIDA

Hasta aquí, Dulanz, de Diario de Navarra. Pero leamos lo que nos dice El Salto, en este artículo escrito hace una semana. Ah, ¿qué es El Salto?
Así pues, no esperéis que hablen de "amenazas, acoso y sabotaje", como hacen los fascistas. Cualquier parecido con Bildu es pura coincidencia.

Aroztegia, el Marina d’Or del Baztán
Cincuenta personas continúan parando las obras de Aroztegia, el Marina d’Or del Baztán
“Pretenden cubrirnos de cemento”, indica el grupo acampado desde hace una semana que ha paralizado los primeros trabajos de construcción. Opinan que "el proyecto distorsionará la estructura social de un valle pequeño y totalmente euscaldún".
Lectura del comunicado en el que anuncian el abandono de la acampada (28.04.21)

Lekaroz es un hermoso pueblo de 341 habitantes del valle del Baztan (Navarra), a dos pasos de Elizondo, el municipio que se hizo famoso con la trilogía de la escritora Dolores Redondo. 
Palacio De Arozteguia S.L. es una empresa que ha conseguido una licencia para construir en Lekaroz 228 chalés, un hotel y un campo de golf. 
¿Puede una empresa invadir un pueblo para construir más viviendas de las que hay en la actualidad y talar árboles para esculpir un campo de golf? 
1er día de la acampada para parar las obras del proyecto
urbanístico en Aroztegia. ARKAITZ ZUDAIRE
Con amigos, cualquier Marina d’Or es posible.

Garbiñe es vecina de Lekaroz. Ella también tiene amigas y juntas llevan acampadas desde el viernes 16 de abril en la zona donde han empezado las obras de construcción del proyecto Aroztegia. No tienen intención de moverse hasta paralizar las obras completamente. De momento, han parado el uso de las motosierras que talaron los primeros árboles, la entrada de los camiones que se llevaron la leña y han impedido que la empresa adjudicataria de las obras construya un puente para que las máquinas crucen el río.
El primer día, la Policía Foral de Navarra identificó a las activistas y las grabó. Los siguientes, han recibido la visita de la Guardia Civil. La presencia policial en el pueblo y en los municipios colindantes es constante, donde también realizan identificaciones.

Como responsable de la comunicación del grupo acampado, Garbiñe expresa su sentir: “No nos vamos a mover de aquí hasta que se paralice este proyecto, que supone la destrucción y desaparición de nuestro pueblo. Pretenden cubrirnos de cemento”.

ARKAITZ ZUDAIRE
No lo dice de forma literaria, sino literal y ahí está el meollo de este asunto: “Este proyecto arrancó hace unos quince años, en el periodo de las ilegalizaciones a partidos políticos. La empresa Palacio De Arozteguia S.L. compró 45 hectáreas de tierras agrícolas y el Ayuntamiento del Baztan las recalificó como suelo urbano, a pesar de la oposición del pueblo de Lekaroz y del valle”, explica el actual alcalde del Baztan, Joseba Otondo (EH Bildu). “Fue un pelotazo urbanístico”, añade.

Pelotazo urbanístico
Por estas palabras, la anterior alcaldesa, de Bildu, fue denunciada. Otondo va por la cuarta querella. Dice que ahora mide sus palabras y las consulta con su abogado, pero que las cosas son lo que son. “Pelotazo urbanístico”, repite. Las tres primeras demandas han quedado archivadas, falta por resolverse la cuarta.
La acogida que ha tenido en el valle la acampada, compuesta por unas 50 personas de día y aproximadamente la mitad durante la noche, ha sido muy buena: vecinos les han llevado comida y les ayudan como pueden. Los dos caseros y caseras con los que ha hablado El Salto tampoco están contentos. Prefieren no dar su nombre, pero consideran que les han robado las tierras. 
Aunque es más complicado que eso, explica el alcalde: la empresa pretende que ellos formen parte del proyecto, tanto en las costas como en los beneficios, si los hubiere (¿cuál es el beneficio económico de costear una red de saneamiento?).
ARKAITZ ZUDAIRE

“Estamos metidos dentro de un PSIS para el que se saltaron a la torera la normativa navarra”, explica un propietario por teléfono. “Vender no hemos vendido nadie, pero nos han quitado la tierra a todas”, explica otra. De las 45 hectáreas recalificadas, no todas son de la promotora, sino que una veintena de prados privados y comunales han quedado dentro de esa área.

Segundo movimiento: PSIS
Además de la recalificación de suelo rústico a urbano aprovechando un espacio temporal en el que el PNV gobernó el Valle, mediante la coalición Nafarroa Bai, pocos años después llegó el siguiente movimiento político que explica porqué este mega proyecto urbanístico pudo seguir su andadura: “A cinco días de la finalización de la legislatura 2011-2015, el Gobierno de Navarra, para gran sorpresa de todos, tramitó el proyecto como un PSIS”, explica el alcalde del valle.
Un PSIS es una figura administrativa propia de Navarra, un Plan o Proyecto Sectorial de Incidencia Supramunicipal. Una carretera, por ejemplo. 
“La legislatura siguiente, 2015-2019, se llenó de pleitos judiciales para intentar parar el PSIS”, apunta Joseba Otondo. No ganaron ni uno. Plantearon consultas populares, en las que primero Lekaroz y luego el valle mostraron su rechazo al mega proyecto urbanístico.
Durante ese periodo, el que fuera el presidente del PNV de Navarra, Manu Ayerdi, ostentó el cargo de vicepresidente de Desarrollo Económico, cargo que renovó con María Chivite como consejero de Economía hasta que fue cesado el 29 de enero de 2021, cuando el Tribunal Supremo le imputó dos presuntos delitos de prevaricación y de malversación de caudales públicos en la concesión de seis préstamos por un importe de 2.600.000 euros entre 2015 y 2017 a la empresa Davalor Salud SL.
DABID SANCHEZ
Desde que el proyecto quedó conformado como un PSIS, el Ayuntamiento del Baztan no tiene capacidad de incidencia, solo pueden acogerse a lo que otras instituciones superiores en rango alegan, como el informe de la Institución Príncipe de Viana, que se encarga de velar por el patrimonio navarro y alertó de que el proyecto de hotel no cumplía la normativa de rehabilitación de edificios históricos, y la ley de contratos públicos de Navarra —la empresa del proyecto tuvo que anular el anuncio de licitación de las obras que han empezado en el Baztan.
“Pero aquí hay unas cuestiones que claman al cielo”, añade el alcalde, “porque nosotros vamos cumpliendo lo que dice la ley pero el Tribunal de Contratos Públicos es un tribunal administrativo que no entra dentro del aparato del poder judicial, por lo que carece de mecanismos para hacer cumplir sus resoluciones”, se queja Otondo. “Hay dos varas de medir: una para las entidades locales y otra para los promotores”.

Competencia autonómica o competencia municipal
Llegados a este punto, critica la “actitud del Gobierno de Navarra, que está siendo el valedor del PSIS, deben actuar para hacer valer el principio de legalidad y llevar a cabo labores de vigilancia”. Por su parte, el Gobierno de Navarra respondió por escrito el 23 de marzo al Ayuntamiento del Baztan asegurando que “esta administración no es competente para la supervisión del proceso de ejecución de las obras de urbanización”, argumentando que es competencia del consistorio municipal “la supervisión y vigilancia de las obras”, con las “correspondientes garantías y avales”, así como “la conservación y mantenimiento de la urbanización una vez sea recepcionada”.
DABID SANCHEZ
Otondo sabe que lo único que podría parar el proyecto Aroztegia es la contestación popular. En ella deposita sus esperanzas. “Este modelo urbanístico es el que marcó la característica propia de la crisis de 2008 en España, cuyas particularidades eran distintas a las de Europa. Durante los años de parranda, los promotores y bancos se beneficiaron y cuando llegó la pifia, el Estado rescató a los bancos con millones del erario público que se traspusieron en recortes a la clase trabajadora. Que en 2021 todavía tengamos que tragar con un proyecto de este tipo me resulta inaudito”, concluye.

Varios barrios diseminados por el monte y 15 pueblos forman el Valle del Baztan. Casi 8.000 habitantes que comparten —así ha sido históricamente— un único ayuntamiento, aunque cada pueblo celebra sus propias asambleas, respetando la institucionalización originaria: los batzarre (asambleas, en euskera) y la Junta General del Valle.

Última hora
Tras siete días de acampada, a las 20 horas de ayer viernes, la empresa Tex retiró la maquinaria de Aroztegia. El grupo de acampada indica hoy que seguirá en las tiendas de campaña, tras no saber si esta marcha es definitiva o las máquinas volverán. En un comunicado de prensa resaltaron el trabajo colectivo para paralizar este proyecto frente a una sociedad que tiende a la individualización.

Actualización 24.09.21
El Consejo de Navarra respalda la licencia de obras de Aroztegia
Una resolución rechaza la petición de revisión de oficio que formuló el Ayuntamiento para denegar la autorización

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es difícil opinar de cuestiones urbanísticas cuando no se conoce el tema en profundidad, pero merece la defensa si se está actuando conforme a la ley. Me pregunto si son actuaciones parecidas a Ulzama (primer campo de Golf -una maravilla de conservación de la naturaleza- y una Carlota Ciganda que pasea Navarra por el mundo entero) y Gorraiz, hay más, pero en ambos sus habitantes no darían un paso atrás. Sin duda traerían progreso a todo el Valle de Baztán. Gracias cronista por el reportaje.
Juan Manuel. A.D.

Carmelo dijo...

Como siempre, los perros de HB o Bildu o como quieran llamarse, ladrando y mordiendo y atacando a bienes y personas, así juegan en todos los pueblos donde controlan los ayuntamientos y a las personas que viven en los pueblos, los cuales viven amedrentados desde hace muchos años.
Es curioso, fíjense en el texto publicitario de la revista "ama el salto, odia el fascismo" curioso, no?
Esta es la izda. radical que odia y aísla a quien no piensa como ellos, y no se dan cuenta que sus métodos, actitudes e intolerancia, ponen en evidencia su totalitarismo, su fascismo.
Vosotros Fascistas, no tenéis ni la exclusiva ni la propiedad de la democracia, proyectais hacia el que no piensa como vosotros todo el odio que os han inculcado desde muy jóvenes y ese odio que proyectais os identifica como fascistas y nazis a vosotros.
Muy buena entrada, Pachi.
Navrazon