Roldán, ese día (2013) en Zaragoza. Foto Bernardo Pérez |
El daño que hizo Roldán a las instituciones, a la lucha contra ETA y con la "trama navarra" en el "caso Urralburu", resulta incalculable. En el tema de la corrupción, Roldán aplica la teoría del ventilador: "otros también y Felipe tenía que conocerlo". Y en el caso de la tortura, "el fin justifica los medios".
Juan José Millás |
J.J. Millás entre vista a Luis Roldán (Zaragoza, 17 nov 2013)
—Visto con perspectiva, ¿cree que fue, en parte, un chivo expiatorio?
—El que yo haya sido un chivo expiatorio no quiere decir que no hiciera todo lo que hice. Dicho esto, es evidente que fui un objeto, como una pelota de pimpón, entre el PP y el PSOE. Para el PP, porque le venía bien para menoscabar al PSOE. Para el PSOE, porque le convenía focalizar todo el mal en una persona.
—Cuando se corrompió, ¿tenía conciencia de estar haciéndolo?
—No reflexionas, formas parte del paisaje, de lo que ves alrededor. Haces lo que se hacía.
Urralburu y Aragón |
—En 1983, siendo delegado del Gobierno en Navarra. Seis millones de pesetas.
—¿Era una práctica habitual?
—Sí, era una práctica habitual.
—¿Vivían, entonces, en una atmósfera general de corrupción?
—Yo consideraba que ese sobresueldo era normal.
—¿Le parecía normal cobrar dinero negro procedente de las arcas del Estado?
—En esos momentos era la práctica habitual.
—¿Quién más cobraba?
—Los jefes de policía tenían una cantidad de 500.000 pesetas de libre disposición.
—¿Quién más?
—Que yo sepa, cobraban el gobernador civil de Madrid, el de Barcelona, los tres gobernadores vascos y yo. Lo sé porque me lo han dicho. No fue probado, pero no tiene sentido que me pagaran a mí y no a los otros.
—¿Quién le pagaba?
—Al principio, el director de la seguridad del Estado, Rafael Vera. Luego, Julián Sancristóbal.
—Este dinero, en su caso, ¿cuánto sumó?
—Posteriormente, ya como director general de la Guardia Civil, empezó a obtener dinero también por comisiones de obras en los cuarteles. ¿Recuerda cuánto dinero reunió con estas comisiones?
—No. En la sentencia quedó acreditado que el monto de las comisiones fue de unos setecientos millones de pesetas. Este dinero se dobló al colocarlo en Suiza en moneda extranjera y debido a las devaluaciones de la peseta. Hubo cuatro en un solo año.
—¿Qué fue de todo este dinero, además de las propiedades que había ido usted adquiriendo?
—Las propiedades fueron embargadas todas, unas ejecutadas por los bancos, y otras, subastadas. Las cuentas bancarias también fueron embargadas.
....
—Por lo que se refiere a la guerra sucia contra ETA, ¿tuvo alguna relación con los casos más conocidos?
—Fui llamado a declarar como imputado por el caso Lasa y Zabala. Declaré y no hubo más.
¡Bolinaga torturador! |
—En Navarra se producían detenciones y denuncias por torturas. En los manuales de ETA se indicaba cómo efectuar la denuncia en todos los casos de detención.
Roldán, ese día (2013) en Zaragoza. Foto Bernardo Pérez |
—¿Significa esto que justifica usted la tortura?
—¿Cuántas vidas se han salvado por confesiones de detenidos que han sido sometidos a tortura? Hablo de vidas concretas. Yo conozco algunas: vidas de jueces, de militares, de fiscales…
—¿Es un sí a la tortura?
—En abstracto, desde un punto de vista intelectual, le diría que no, pero ante la tesitura de torturar a alguien cuya declaración puede salvar la vida de alguien, le diría que sí.
Vendimia en Chile |
—Imposible.
—¿La corrupción era estructural?
—La corrupción era y es estructural.
....
—¿Qué espera de la vida?
—Estoy agotando las últimas vendimias de la vida, me sobrevivo. Durante 10 años, la única compañía que tuve fue la nada, ahora me siento muy acompañado y querido por mi esposa y familia. Espero el final con serenidad.
Ah, si quieres leer la entrevista completa...
No hay comentarios:
Publicar un comentario