lunes, 10 de enero de 2022

Jamalandruqui, magia e ilusión

Calle Navarrería, desde el palacio de Rozalejo. Roisin 1950 ca
Nacido el 17 de abril de 1934, Ricardo Rebolledo Zubiarráin, "Jamalandruqui", llevó la magia y la ilusión por los barrios de Pamplona y pueblos de Navarra, desde los 14 años hasta su repentina muerte, con 54 años.
Como ya señalé en la entrada de Perutxiki, "por los años 60 mi padre solía hablarme de Perutxiki y Jamalandruqui. De Perutxiki, siempre con una sonrisa. Se notaba que le hacía reír. De Jamalandruqui, con admiración".
Pincha o descárgatela
Admiración que aumentó en mí hacia 1980, cuando en una tienda de la Navarrería, la calle donde él vivía, encontré un "jamalandruqui", un rompecabezas hecho de dos piezas de alambre que había que separar. A pesar de que ya llevaba algunos años enseñando lógica matemática, me costó lo suyo separarlas sin mirar la hoja de instrucciones.

Tres tragedias
1937. Su padre, Ricardo Rebolledo Antolín fue fusilado el 12 de marzo de 1937 "en la prisión de Pamplona, adonde había sido conducido bajo la acusación de redactar los discursos para los dirigentes de la FAI, una organización anarquista". El hijo, no había cumplido tres años.
1980. Su hija, Idoya Rebolledo Lizaur, de siete años, fue atropellada mortalmente por un vehículo que se subió a la acera de la calle Compañía.
1988. Su repentina muerte, por infarto, el 16 de abril de 1 988, a los 54 años de edad, en su plenitud.

Los comienzos
Como recordaba el humorista pamplonés y amigo suyo, Juanjo Ruiz, «comenzó a los catorce años (1948) en el Teatro Gayarre con el padre Carmelo (pincha para conocerlo) y trabajó durante veinte años con el artista Peruchiqui. Jamalandruqui aprendió mucho leyendo libros de magia —prosigue— y de joven tuvo tanto éxito que algunos magos de diversas regiones de España le pedían consejos».
Sin embargo, hay que esperar una década para que sus actuaciones merezcan la atención de la prensa:
- primero como Jamalandruki, (22 apariciones): 1957, 58, 60, 82, 83, 85, 86, 87
- y enseguida como Jamalandruqui, (46 apariciones): 1961, 74, 76, 77, 78, 79, 80, 81, 82, 83, 85, 87, 88
Tanto con "k" como con "q", se me hace extraño que en los años 60 no aparezcan en la prensa sus actuaciones (que las tuvo que haber)

40 años dedicados al espectáculo
Desde los 14 hasta los 54, fueron 40 años los que dedicó a su profesión de mago. Pero no sólo actuaciones, también intentó sacar adelante una escuela de ilusionismo que no prosperó: «Los padres -decía Jamalandruqui- no mandaban a sus hijos por considerar que era una pérdida de tiempo. Preferían que se dedicaran a cosas útiles más que a fomentar ilusiones».
Hay unos cuantos anuncios en la prensa como éste:
26/10/1983 SI VD. DESEA aprender ilusionismo en el sentido de hobby, arte o profesión. Jamalandruqui. E 225338. (32208)
Jamalandruquis, para amenizar la espera, en la peluquería de Manolo B.
Entrevista de 1986 (ayuda)
En el obituario tras la muerte de Jamalandruqui, habla Javier Labiano de una entrevista que le hizo Diario de Navarra en 1986. La he buscado con insistencia, pero nada. Debido a los escasos datos que he encontrado sobre el mago, era muy importante dar con ella. Pero no ha habido manera. Si alguien la encuentra, me encantaría que se pusiera en contacto conmigo para publicarla en esta entrada.
El Padre Carmelo junto al  Tío Ramón

Obituario a su muerte
■ Ricardo Rebolledo, «Jamalandruqui», murió de infarto (DN Lunes 18 abril 1988)
■ El popular ilusionista falleció el sábado en su domicilio de Pamplona
Ricardo Rebolledo Zubiarráin, Más conocido como el ilusionista «Jamalandruqui», que ayer hubiera cumplido 54 años, murió el pasado sábado de un ataque al corazón en su domicilio de la calle Navarrería de Pamplona. El hecho ocurrió a las once y media de la mañana cuando repentinamente el artista sufrió un fuerte dolor en el pecho producido por el colapso que en breves instantes le causó la muerte.

Aparentemente gozaba de buena salud
Tomás Asio, "Perutxiki"
Aunque aparentemente Ricardo Rebolledo gozaba de buena salud, por lo que su muerte extrañaba ayer a los amigos y allegados que se acercaron al tanatorio al que fue trasladado el cadáver, su esposa, Cecilia Lizaur, aclaraba que el ilusionista había sufrido hace ya tiempo varios amagos de infarto, si bien ella se había enterado de ello recientemente.
«El jueves pasado, dijo ayer, fue a casa de Peruchiqui, su compañero de muchos años, y se puso malo. Le dolía el pecho, por lo que lo tumbaron en un sofá y se le pasó enseguida después de haber tomado una manzanilla. Después me he enterado también de que en 1985, mientras actuaba en una conocida sala de fiestas pamplonesa le volvió a pasar lo mismo, le dolía el pecho. El sábado le volvió a doler, y murió de un infarto probablemente. Los médicos le han hecho la autopsia y mañana (por hoy) sabremos el resultado. La verdad es que ha sido algo sorprendente, porque ni fumaba ni bebía y aparentemente parecía que gozaba de buena salud».

Cuarenta años de espectáculo
Ricardo Rebolledo llevaba cuarenta años dedicado al mundo del espectáculo. Como recordaba ayer el humorista pamplonés y amigo suyo, Juanjo Ruiz, «comenzó a los catorce años en el Teatro Gayarre con el padre Carmelo y trabajó durante veinte años con el artista Peruchiqui que ayer se encontraba muy afectado por el suceso). Jamalandruqui aprendió mucho leyendo libros de magia —prosigue— y de joven tuvo tanto éxito que algunos magos de diversas regiones de España le pedían consejos». «Jamalandruqui», que deja mujer y un hijo de diecinueve años, Ricardo, tenía previsto partir ayer hacia Barcelona, donde iba a permanecer quince días para realizar varias galas. Actuaba' habitualmente para niños y mayores, fundamentalmente en las escuelas, por lo que era muy conocido entre el público menudo de Navarra, y recientemente actuó en la prisión de Pamplona.
Los niños, el mejor público
En una entrevista concedida a este periódico en 1986, Ricardo Rebolledo elegía a los niños como su mejor público: «Su capacidad de sorpresa es muchísimo mayor. Los adultos, más que disfrutar viendo el juego, tratan de adivinar dónde se encuentra la trampa», y recordaba que intentó sacar adelante una escuela de ilusionismo, pero no prosperó: «Los padres no mandaban a sus hijos por considerar que era una pérdida de tiempo. Preferían que se dedicaran a cosas útiles más que a fomentar ilusiones».
Javier Labiano
Esquela de su esposa
Casualmente, hace unos días me mandaron la esquela de su esposa:
31/12/2021 Cecilia Lizaur Beares (VDA. DE RICARDO REBOLLEDO "JAMALANDRUKI") falleció el día 30 de diciembre de 2021 a los 76 años de edad. GOIAN BEGO Sus hijos, Ricardo y Iosune, Idoia (+); hermanos, Juan Antonio (+), Ángel (+) y Emilia (+), Tere y José Antonio (+), Emilio y María, Guruzte (sic); hermanos políticos, sobrinos, primos y demás familiares 
Comunicamos que el funeral se celebrará HOY VIERNES, día 31, a las SIETE Y MEDIA de la tarde en la parroquia de San Agustín. La conducción al cementerio de Pamplona se realizará HOY VIERNES a las ONCE Y CUARTO de la mañana desde el tanatorio Txantrea IZARRA (C/ Etxarri Aranatz, 2) (IZARRA Tanatorio 948 05 90 90) PAMPLONA-IRUÑA, 31 DE DICIEMBRE DE 2021 Recepción de esquelas...

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Maribel
🥰👏🏻 Jalamandruqui... Recuerdo verlo de niña en la escuela de Berrioplano y comprar alguno de sus juegos de magia.

Anónimo dijo...

Manolo B.
Actualmente en mi peluquería, si tienes que esperar unos minutos, siempre hay en una bandeja con varios rompecabeza de anilla que te vuelven loco el poder librelarlas, todas son creaciones de Jamalandruqui. 😀😀

Jokin dijo...

Lo conocí en alguna actuación que participó junto con la Escolanía de San Antonio, en la yo cantaba.

Anónimo dijo...

David Arizmendi
Creo q actuaba en fiestas de Añézcar, cuando era yo crio

desolvidar dijo...

Seguro. Ha actuado hasta en la Plaza Mº de Azuelo, cuando parecía el foro romano

J-A. Zubiaur dijo...

A fines de la década de los 50, cualquier acto público o privado en el que participara Jamalandruqui tenía garantizada la participación de numeroso público infantil y de mayores. Recuerdo que más que mago era un verdadero "ilusionista", tenía labia y creaba un entorno que a los chavales nos situaba, apasionados, fuera del mundo que vivíamos a diario.