domingo, 31 de octubre de 2021

Esáin, Amat y el ojo canónico

Partido de pala Esáin (Anué) Carlos Amat 1920-29
Al comenzar esta entrada para rato sospechaba que los tres elementos del título iban a quedar inexorablemente unidos, de modo sorprendente y tan personal.

"Vista general de un partido de pala en el frontón de Esáin en el valle de Anué. En primer plano, la cancha con 5 hombres jugando a pala, en segundo plano el frontón en la fachada de la posada, detrás 2 hombres viendo el partido y, al fondo, los montes del entorno." (Fototeca AGN)
Digamos que detrás de los dos más cercanos hay otro jugador que es precisamente el que pone en aprietos al más lejano.
Si escribes en el buscador "Frontón Esáin" (sin comillas), aparecen 5 resultados.
Cuando veo estas fotos de hace un siglo, me gusta conocer cómo está la zona en la actualidad. Y Google Maps 2009 (date una vuelta) nos lo retrata perfectamente:
Animado por el éxito, he ido de nuevo a la fototeca de AGN para ver si había más imágenes de Esáin y su frontón y me he llevado una sorpresa morrocotuda: nada menos que 65 fotografías de un pueblo tan pequeño. Y todas de Carlos Amat. Alucinante.
¿Qué tenía que ver Carlos Amat con Esáin? Pue fijaos, la propia fototeca de AGN nos lo dice:

Carlos Amat
RESEÑA BIOGRÁFICA
Carlos Amat Erro
Carlos Amat Pintado, nacido en Castellón, fue médico y el primer oftalmólogo de Navarra. En 1896 fue destinado a Cuba como médico militar. En 1916 actuaba como vocal de la Comisión Mixta de Reclutamiento de la provincia de Navarra. Trabajó como oculista en el Hospital de Navarra. En 1919 figura como comandante médico recibiendo la cruz de la orden de San Hermenegildo. En 1933 pasó de médico en situación de reserva a retirado. Contrajo matrimonio con María Erro Yaben, de Esáin, enfermera. Falleció en Pamplona, el 13 de marzo de 1946.
Su hijo, Carlos Amat Erro (Esáin, 20 de febrero de 1897 - Pamplona, 21 de diciembre de 1983), fue también oftalmólogo. Estudio la carrera en Barcelona. En 1924 fue nombrado teniente médico de la Armada. En 1925 desempeñaba sus servicios en el acorazado Alfonso XIII durante el desembarco de Alhucemas. En 1933 defendió su tesis en la Universidad Central de Madrid sobre el "Estudio médico-tiflófilo (que se interesa por los ciegos) de la provincia de Navarra". Se afilió a Falange Española y posteriormente, durante la Guerra Civil, prestó distintos servicios como médico voluntario oculista en varias unidades y equipos quirúrgicos en el frente de Guipúzcoa, en el frente norte, en la campaña de Teruel, en la campaña de Levante y finalmente en Madrid. Terminada la Guerra Civil se dedicó exclusivamente a su labor profesional. En 1962 fue oftalmólogo de los Servicios Provinciales de Sanidad de Pamplona. Fue miembro de la Sección para el Fomento del Vascuence de la Institución Príncipe de Viana.

Amat Erro (dcha) Mto. Canción Roldán Ibañeta
Nada más leer esta reseña biográfica, he caído en la cuenta de algo que ha tenido -y sigue teniendo- una gran importancia en mi vida:

Anécdota personal
Cuando era muy niño, mis padres se fijaron en que yo no veía bien. Tendría unos 6 años y mi madre me llevó, hacia 1956, a la consulta -calle Eslava 1- del Doctor Amat (ahora sé que el hijo, Amat Erro). Tras examinarme, se dio cuenta de que apenas veía  del ojo derecho y que solo usaba el izquierdo.
Entonces se desarrolló -luego, de mayor, me di cuenta- el diálogo más surrealista del mundo:
- ¿Qué va a ser este chico de mayor? -preguntó el doctor
- Pues queremos que sea sacerdote -contestó mi madre
- ¿Sacerdote? Pues ningún problema, porque tienen el misal a la izquierda. Por eso al ojo izquierdo se le llama "ojo canónico", porque cuando leen el Canon, el misal se pone a la izquierda. Su hijo ve muy bien del izquierdo, así que se acabó el problema.

Esáin, Carlos Amat Erro
Y así me quedé con el ojo derecho vago de por vida.
Hoy -y desde hace muchísimos años, yo creo que entonces también-, cuando un niño tiene ojo vago le ponen un parche en el ojo bueno para que el cerebro no tenga más remedio que espabilar al ojo vago.
Bueno, pues el doctor Amat -una institución en aquella Pamplona- no cayó en la cuenta de ello ni de que podía salirme del Seminario (como así fue) o tener un accidente en el ojo izquierdo y quedarme casi ciego.
Leo en esta página:
"En el tratamiento para la corrección del ojo vago hay que tener en cuenta que, si no se aplica en el momento adecuado del desarrollo del niño, durante la llamada época de plasticidad cerebral (hasta los 7 u 8 años aproximadamente), la pérdida de visión puede ser permanente e irreversible. Por el contrario, si el tratamiento se aplica en el momento correcto, la recuperación de la visión suele ser total en la gran mayoría de los casos. Los pacientes tratados de ambliopía suelen recuperar la visión totalmente y desarrollan su vida con normalidad".
Por suerte, a mis 71 años sigo viendo lo suficiente para lo que necesito, pero sólo con el ojo izquierdo. Una situación peligrosa.

2 comentarios:

Aritz Lizarraga Olascoaga dijo...

Bonita historia, Pachi. Mi hija tiene el mismo problema. Afortunadamente en esta época todos los oftalmólogos usan ese tratamiento. Ha estado un par de años con parche y ahora de momento no lo necesita. Un abrazo.

desolvidar dijo...

Y qué años tiene la mueta?