El cortejo fúnebre de Ezequiel Seminario, por Blanca de Navarra |
Desde 1932, el caso Ezequiel Seminario ha permanecido casi oculto. Un par de fotografías me han llevado hasta Miguel, sobrino-nieto de la víctima, quien me ha proporcionado la crónica de la tragedia de una familia, ejemplo de dignidad: "Nada de venganzas. Pedid, todos, a Dios que perdone al agresor, como yo le perdono» (madre de Ezequiel)
Casi todas las fotos pertenecen al álbum familiar de Casa Seminario, que Miguel y yo iremos subiendo a Facebook a lo largo del día
EL
PENSAMIENTO NAVARRO DIOS-PATRIA-REY
Pamplona,
sábado, 20 de febrero de 1932
EL SUCESO DE AYER
El Provisor de
Diócesis, asesinado en su despacho
Pamplona tuvo ayer momentos de una inenarrable pesadumbre. Pesadumbre
que aún dura y que tardará en desaparecer por la índole del delito
y por la calidad de los protagonistas.
El muy ilustre señor provisor de la
diócesis don Ezequiel Seminario, en el pleno desempeño de su
función curial, había sido asesinado con, al parecer, estudiada
premeditación por el industrial y empresario cinematográfico don
Álvaro Galbete para el cual, sometido ya al fuero de la justicia, no
hemos de tener en este obligado comentario las palabras durísimas
correspondientes a su criminal acción porque la caridad cristiana
nos advierte que debemos odiar al delito y compadecer al delincuente.
Condenemos pues con toda la energía de
nuestra alma el hecho a todas luces vil y deseemos que en momentos de
serenidad el arrepentimiento haga presa en el ánimo del matador para
que esa satisfacción que dé a la justicia divina haga más
llevadera la que ha de tener que dar a la justicia humana.
Pongamos en cambio unas frases todos
los sentidas que la emoción impone para la figura del muerto de
cuyas virtudes y bondades tenía noticia toda Navarra, que admiraba
en el señor Seminario al hombre culto estudioso y activísimo que
ponía su prestigio, talento y diligencia en la promoción y
desarrollo de las distintas formas de Acción Católica, cuya
importancia y cuya responsabilidad en estos momentos del vivir
español son bien patentes.
Todo esto, al margen de su personalidad
como jurisperito en los asuntos que afectan a las normas canónicas,
que había sabido rodear de un ambiente de serenidad y de justicia
tales, que sus informes y sus fallos eran acogidos como fruto maduro
de la más recta ponderación.
Casa Seminario |
La inflexibilidad de la verdadera
doctrina eclesiástica, base de su característica inflexibilidad,
acarreó ayer al señor Seminario una muerte prematura y violenta,
sentida por todo el pueblo navarro con la misma humanidad con que
condena la vileza del crimen.
Ante el cuerpo, aún insepulto, de la
víctima de su deber, nos descubrimos y oramos, con la seguridad de
que nuestras preces humildes llegan al Señor cuando ya ha premiado
los merecimientos de su celoso ministro.
El Pensamiento Navarro, que ya ayer
expresó al Ilustrísimo señor Obispo de la Diócesis y a los
familiares (padres y hermanos) del desventurado señor Seminario, la
participación que tomaba en su dolor, les reitera públicamente su
pésame.
Cómo se desarrolló el suceso
Ayer, poco después de la una menos
cuarto, fue asesinado en su propio despacho del Palacio Episcopal el
señor Provisor y Vicario General de la Diócesis, muy ilustre señor
doctor don Ezequiel Seminario, por nuestro convecino, conocido
industrial don Álvaro Galbete.
Poco tiempo después, llegaba a nuestro
conocimiento la noticia de este brutal suceso y nos personamos en el
Palacio Episcopal.
Eran los momentos de inenarrable
emoción. Todo el mundo se dedicaba a prestar auxilio al desgraciado
señor Seminario que había caído desplomado tras una fugaz
entrevista con el criminal. La impresión no podía ser más
pesimista: con el cráneo destrozado el señor Seminario iba poco a
poco perdiendo la vida. Allí mismo fue cuidadosamente colocado sobre
unos colchones, y muy pronto fue reconocido por el médico don
Bernardino Tirapu. El señor obispo, el secretario de cámara,
notario y personal de las oficinas, todos, con la angustia reflejada
en sus rostros querían con el corazón, dar vida al desgraciado
provisor. Todo en vano.
He aquí lo ocurrido, según los datos
recogidos en el lugar del suceso.
Armario con sus casullas en Casa Seminario |
Pocos minutos después de las 12:15
llegaba Galbete al Palacio Episcopal. Había ido en un pequeño
automóvil de su propiedad. Subió al piso primero, y dirigiéndose
al provisorato, poco después habló con el capellán de Su
Ilustrísima don Miguel Jabat, a quién preguntó si podía hablar
con el señor obispo. El señor Jabat le contesto afirmativamente,
pero advirtiéndole que no podía hacerlo en el acto, pues el señor
Obispo se encontraba atendiendo una visita.
Entonces -dijo Galbete-, veré primero
al provisor. Allí tuvo que hacer antesala, como la hacían otros
visitantes. Estos nada anormal observaron en Galbete. Antes bien,
entretenía éste la espera fumando un cigarro puro y leyendo un
periódico. A eso de la una menos cuarto, tocóle el turno y pasó al
provisorato.
Un minuto habría transcurrido, cuando
Galbete salía del despacho, y volviendo a encontrarse con el Señor
Jabat, le dijo: ahí queda el provisor, acabo de matarle.
Galbete estoicamente, habías esperado
su hora y, consumado el crimen, bajó la escalera de palacio, subió
a su automóvil que dejó frente al garaje Irurzun, en la calle de
Yanguas y Miranda, siguiendo a pie hasta el juzgado para entregarse
al juez. Éste, que se hallaba en sus habitaciones particulares,
recibió a Galbete, quién le dijo: -acabo de matar al provisor. Tome
usted esta pistola.
El señor Santamaría recibió la
primera noticia del horripilantes suceso de labios del propio
asesino.
Quedó Galbete detenido, y el digno
juez de instrucción, don Juan Santamaría, con el secretario sr
Sainz y auxiliares se trasladó al Palacio Episcopal para iniciar las
diligencias sumariales.
En palacio entretanto era general la
consternación. El acto villano, realizado tan fríamente por ese
hombre, había producido el más intenso dolor en aquella casa.
Allí se encontraban con los señores
del juzgado, el señor obispo rector y vicerrector del Seminario,
todo el personal de palacio y los médicos señores Gortari,
Ezquieta, Echarte, Armendáriz, Irigaray y Lazcano, con el señor
Tirapu. Todos estos, con diligencia exquisita, prodigaban al
infortunado provisor los cuidados de las ciencias. Repetían con
inyecciones y a cada momento observaban vigilantes el curso de
aquella agravación, que por momentos se acentuaba.
El Sr rector del Seminario le dio la
absolución sacramental, y luego llegaba el confesor y director
espiritual de don Ezequiel, el Padre Superior de los Corazonistas,
quien le dirigió conmovedoras exhortaciones. Cerca se encontraban el
padre y una de las hermanas del señor Seminario a los que el prelado
y acompañantes prodigaban consuelo.
Por dos veces se le oyó exclamar
Jesús. Aquella terrible agonía que comenzó a las 12:45 minutos
finalizaba a las 3:45 aproximadamente.
(aquí hay un corte en el relato)
en la ceja izquierda que le interesaba
la masa encefálica producida con pistola automática del número 6.
El hecho ocurrió en el sofá existente frente a la mesa del despacho
del provisorato. Amortajado con los sagrados ornamentos, fue colocado
en el mismo despacho el cadáver del señor provisor.
El prelado, canónigos, catedráticos
del Seminario y otros muchos sacerdotes desfilaron ante el cadáver
rezando responsos.
También, el desfile de público fue
grandísimo, reflejándose en los rostros la impresión terrible
producida en todos.
El gobernador civil, señor Andrés, al
enterarse de lo ocurrido, envío a palacio al secretario del gobierno
don Modesto Font para que en su nombre diera el pésame a los
familiares del señor Seminario.
Las causas del crimen
No es indiscreción periodística en
este caso el hacer públicas las que estimamos verdaderas causas del
crimen cometido ayer en la persona del señor provisor, aunque sean,
como son, de índole delicada, porque el equívoco es hoy más que
nunca perjudicial por la ocasión y por el ambiente en que el hecho
sea cometido.
Del dominio público es el pleito
familiar que el Sr Galbete sostenía y hacia cuya legalización se
encaminaba, habiéndose llegado a los términos últimos en la
tramitación. Y es del dominio público también porque el propio
señor Galbete lo expandió por medio de un folleto que en dicho
pleito había cumplido ya su misión el tribunal eclesiástico y
actuaban los tribunales ordinarios.
Pues asunto que con ello se relacionaba
y no de otra índole, como se indicaba en la información que ayer se
dio por radio desde Barcelona, llevo al matador hasta el despacho de
su víctima.
Datos biográficos
A la izda de la Iglesia, con su galería de 8 ventanas, Casa Seminario |
El señor Seminario nació en Mañeru.
En el próximo mes de abril hubiese
cumplido 37 años.
Su hoja de estudios es brillantisima.
Cursó la carrera eclesiástica en
nuestro Seminario, obteniendo en todas las asignaturas las notas de
meritíssimus, y los primeros premios en casi todos los cursos. Al
mismo tiempo cursaba el bachillerato en el Instituto de Pamplona y la
carrera de abogado en la Universidad de Zaragoza, en la que obtuvo el
título de Licenciado en Derecho Civil en 1935.
Oratorio en Casa Seminario |
Era sacerdote desde 1918.
Había ejercido los siguientes cargos
ministeriales: coadjutor de Villafranca, coadjutor de Mañeru,
catedrático de metafísica y de derecho canónico del Seminario.
Desempeño, además, los cargos de consiliario de la asociación de
estudiantes católicos, confesor de las Agustinas Recoletas, juez
Prosinodal.
Al ser promovido al episcopado el Ilmo
señor don Manuel Arce, y quedar vacante la canonjía doctoral que
aquel desempeñaba, fue elegido doctoral trás brillantes
oposiciones. El señor Seminario pocos días antes había opositado
también a la canonjía doctoral de Vitoria con brillante resultado.
Al mismo señor Arce sucedió en los
cargos de provisor y vicario general de la diócesis, en cuya función
se hallaba, cuando le sorprendió ayer la muerte en las trágicas
circunstancias reseñadas.
Era en la actualidad director diocesano
de Acción Católica, en el cual cargo actuaba con entusiasmo.
A su cultura y carrera brillantísima
se unían en el señor Seminario la bondad de carácter, el atractivo
de personas, humilde hasta la exageración y diferente, afectuoso y
cordial con todo el mundo.
Por todo esto, la emoción del suceso y
el dolor que aquel produjo en Pamplona no puede expresarse con
palabras.
La capilla ardiente
Ya anochecido, el despacho del
provisorato quedó convertido en capilla ardiente.
Colocado el cadáver en severo féretro
rodeado de blandones y presidido por una gran cruz, comenzó el
velatorio, en cuyas primeras horas actuaron los compañeros de
Cabildo y personal de palacio.
Durante la noche han velado el cadáver
los alumnos internos del Seminario Diocesano.
Durante la mañana de hoy se dirán
misas de corpore insepulto.
La conducción del cadáver al
cementerio se celebrará en la tarde de hoy
Hoy será practicada la autopsia al
cadáver. A las 4:30 será el depósito del cadáver al cementerio.
Los funerales se celebrarán el próximo lunes en la Catedral.
Acción Católica
En señal de duelo por la muerte del
muy Ilustre señor don Ezequiel Seminario, provisor y vicario general
de la diócesis y Consiliario Diocesano de Acción Católica, se
suspenden las conferencias catequísticas que se venían dando en la
avenida de Roncesvalles 1, hasta el próximo martes 23 del corriente.
EL PENSAMIENTO NAVARRO DIOS-PATRIA-REY
Pamplona, domingo, 21 de febrero de 1932
Después de la muerte del Provisor
El cortejo, en el atrio de la Catedral |
La conducción del cadáver al
cementerio constituyó una grandiosa manifestación de duelo
Cierre de comercios, telegramas de
pésame
Como decíamos en nuestro número de
ayer quedaron durante la noche velando el cadáver del muy ilustre
señor provisor los alumnos del Seminario, acompañados en las
primeras horas por algunos profesores y funcionarios de palacio.
Por la mañana, el Ilmo Señor Obispo y
el capellán don Miguel Java celebraron la Santa Misa en sufragio del
alma del ilustre finado.
Luego comenzó el desfile de multitud
de gentes que querían rendir su tributo postrero al bonísimo don
Ezequiel, rezandose, con este motivo, ante el cadáver muchísimos
responsos. El clero de Navarra ha desfilado en gran número,
testimoniando al prelado, al Cabildo Catedral y a los familiares del
señor provisor la expansión de su condolencia.
Pero no han sido solo dulces, como ya
apuntábamos, los que han hecho esta manifestación de dolor, sino el
pueblo entero, pues representaciones de todas las clases sociales de
personas que invadieron durante la mañana y primeras horas de la
tarde de ayer las escaleras y pasillos del Palacio.
Estuvieron también durante la mañana
de ayer en el Palacio Episcopal el Gobernador interino, Presidente de
la comisión gestora don Constantino Salinas, el Alcalde y otras
autoridades, representantes, entidades, congregaciones etcétera.
Procedente de Madrid llegó ayer el
alto funcionario de la carrera consular don Álvaro Seminario,
hermano de la víctima, el cual, después de saludar a sus
apenadísimos padres, se trasladó a Palacio para besar por última
vez a su desventurado hermano y orar ante su cadáver.
autopsia al cadáver en una de las dependencias de palacio.
El cortejo fúnebre, por Blanca de Navarra |
llevarla a cabo el Dr señor Martínez
de Ubago en calidad de médico forense y los Héctor y los doctores
Gortari don Joaquín y Vigaray don Ángel y Armendáriz la diligencia
se llevó a efecto con toda escrupulosidad y detenimiento el informe
que aún no ha tomado estado oficial, dice que la bala estaba
inmediata al orificio de entrada, interesando la masa encefálica,
que destrozó.
Para mucho antes de las cuatro de la
tarde, los alrededores del Palacio Episcopal, toda la calle
Dormitalería hasta la Catedral, el atrio de ésta y el patio del
Arcedianato, claustro y capilla de San Francisco Javier, rebosaban de
gente.
En la capilla principalmente, dónde
era esperada la llegada del cadáver, no se podía dar un paso.
Pero no obstante estar anunciado el
traslado para las 4, por el motivo ya apuntado de la hora en que
comenzó la diligencia de autopsia, la traslación del cadáver desde
el palacio a la Catedral hasta muy cerca de las 5, en que el féretro
de metal empavonado, quedó depositado sobre un severo túmulo
rodeado de hachones encendidos y entorno del cual se situaron las
autoridades presididas por el ilustrísimo prelado y los hermanos del
finado.
El traslado se ha hecho por el interior
y a hombros de varios jóvenes vecinos de Mañeru.
Entonóse un solemne responso y acto
seguido en las naves de la catedral comenzó a organizarse la
comitiva que arranco desde el atrio hacia la calle Navarrería.
Abrían marcha los seminaristas y
seguían buen número de asilados. Inmediatamente iba la carroza
fúnebre y tras ella, presidiendo el duelo, el ilustrísimo señor
obispo con los hermanos del finado; el gobernador civil interino,
Constantino Salinas; el secretario de Gobierno Civil modesto Font; el
comandante militar de la plaza señor Pasot y el alcalde don Nicasio
Garbayo, el teniente fiscal señor Huertas y el juez señor
Santamaría.
El Obispo Tomás Múñiz, por Mayor hacia la Taconera |
Detrás, representantes de la Curia
Eclesiástica, personal de oficinas de palacio, Juntas de Acción
Católica y Asociación Pro intereses de los religiosos; Congregación
Mariana; centro de obreros católicos, representantes de
congregaciones y asociaciones religiosas etcétera
Y luego todo Pamplona, porque toda la
ciudad ha sentido y se ha conmovido por este crimen sin excusas.
Las calles Navarrería, Mercaderes y
Mayor estaban además atesadas de público que se apiñaba en las
aceras y en los balcones de las casas.
Nota que demuestra la participación
que el pueblo ha tomado en el dolor por la muerte del Señor provisor
es la de que, con escasísimas excepciones, el comercio de todas las
calles del trayecto tenía cerradas sus puertas y echadas las
persianas y cierres de sus escaparates.
Después de las seis de la tarde
llegaba la comitiva fúnebre al portal de la Taconera, donde se
despidió el duelo después de rezarse un responso.
Al cementerio le llaman los castizos "la huerta Larequi" |
En la capilla, el capellán señor
Larequi entonó un responso y acto seguido el féretro fue llevado al
panteón de canónigos en el que el cadáver del señor Seminario
recibió cristiana sepultura. Antes, nuestro amadísimo prelado Dr
Muñiz rezó un responso.
Ya anochecido, regresaba a Pamplona la
caravana de automóviles, después de haber rendido el último
tributo al que en vida fue inteligente y culto provisor de la
diócesis, hombre bonísimo, muy ilustre señor don Ezequiel
Seminario, cuya alma gozará ya las celestiales delicias.
En la puerta de la casa donde habitan
los familiares del finado, José Alonso 4, se instaló la presidencia
del duelo. Al frente de ella, el señor obispo recibió los últimos
testimonios de pésame.
Repetimos a sus padres y hermanos, al
reverendo Prelado y al Cabildo Catedral de Pamplona, la expresión de
nuestro dolor.
Alvaro recibe el pésame en José Alonso 4 |
La Diócesis de Vitoria
En la manifestación de duelo que
acompañó al cadáver del señor provisor hasta el cementerio, la
Diócesis de Vitoria estaba dignamente representada por su vicario
general muy ilustre señor doctor don Justo Echeguren y el virtuoso
presbítero don Zacarías Múgica, hermano del prelado.
Testimonios de pésame
En la tarde de ayer se recibieron en el
Palacio Episcopal los siguientes telegramas de pésame del Exmo.
cardenal arzobispo de Tarragona; excelentísimos señores arzobispo
de Zaragoza, obispo de Zamora, Barcelona, Osma, Orense, Badajoz y
Vich; del vicario general castrense, arcipreste de Almería. Doctoral
de Tudela, provisor de Orense, provicario general de Vitoria;
arciprestes de Estella, Baztán, Vera, Sangüesa, Falces, Roncal y
Tafalla; tenientes arciprestes de Sesma y Caparroso; del diputado a
Cortes don Joaquín Beunza, del exgobernador civil de Navarra señor
Bandrés; del Cabildo parroquial de San Juan de Estella y de
Metauten; del párroco de Lesaca, del superior de los Agustinos de
Lodosa, del párroco, Apostolado de la Oración, Hijas de María,
Cofradía del Rosario y Junta Parroquial de Carcastillo; del clero y
fieles de Olite; del señor García Rago; señores Alfaro y Sotés de
Vitoria y centro Navarro de Estella.
Además los pliegos colocados en el
vestíbulo del Palacio cubriéndose de firmas de entidades y
particulares.
Así como nosotros perdonamos
La madre, doña Celestina |
No queremos cerrar esta crónica
luctuosa sin recoger un rasgo verdaderamente conmovedor que pone de
relieve lo fácil que es rayar en la sublimidad cuando se tiene un
alma templada en la fragua de los cristianos sentimientos. Nos
referimos al momento en que se dió a la madre del Señor Seminario
la infausta nueva de la muerte de su hijo.
Tremendamente doloroso fue el trance y
el corazón de la señora de Seminario se laceró,
dando de ello
muestra el ahogo en que se debatió momentáneamente. Pero pronto se
sobrepuso y, aunque entrecortada por la emoción, tuvo palabras
conmiserativas para el matador de su hijo, rogando al padre y a los
hermanos que perdonasen al criminal como ella sinceramente le
perdonaba.
Cuantos conocieron este rasgo de
abnegación y conformidad cristianas quedaron admirados y se
deshicieron en elogios merecidísimos
Esquelas:
EL MUY ILUSTRE SEÑOR.
Doctor don Ezequiel Seminario Martínez
Provisor y Vicario General de la Diócesis
falleció en el Palacio Episcopal en el día de ayer, a las 3,45 de la tarde
después de recibir los Auxilios Espirituales y la
Bendición de Su Santidad
R.I.P.
El Ilmo. Sr. Obispo de la Diócesis el Ilmo. Cabildo Catedral
y la familia del finado,
INVITAN a sus amistades a la conducción del cadáver al cementerio, que se celebrará HOY, sábado a las cuatro y media de la tarde, por lo que les quedarán agradecidos.
No se invita particularmente,
Pamplona, 20 de Febrero de 1932.
don Ezequiel Seminario Martínez
profesor y
vicario general de esta diócesis
falleció en esta ciudad a las 4 de
la tarde del día 19 de febrero
a los 36 años de edad
después de
recibir los auxilios espirituales
RIP
el excelentísimo señor obispo
y Cabildo Catedralicio; sus afligidos padres don Ezequiel y doña
Celestina; hermanos don Álvaro, don Alfredo, don Ignacio, Don Alfonso, doña María Dolores, doña María de la Concepción, doña María
Luisa y don Carlos; hermanos políticos, tíos primos sobrinos y demás
parientes
suplican a sus amigos y conocidos encomienden a Dios
Nuestro Señor en sus oraciones el alma del finado y asistan a los
funerales que en sufragio de la misma se celebrarán mañana lunes
día 22 a las 11 de la mañana en la Santa Iglesia Catedral y el
martes y miércoles a las 10:15 en la misma Iglesia Catedral por cuyo
favor les quedarán sumamente agradecidos
Pamplona 21 de febrero de
1932
Secuencia
Palacio Episcopal |
Viernes 19 de febrero 1932
12:15 llegaba Galbete al Palacio
Episcopal
12:45 tocóle el turno y pasó al
provisorato. En un minuto, dispara a Ezequiel
Galbete se entrega en la Audiencia
Provincial
15:45 Muere Ezequiel
Noche: Capilla ardiente y Velatorio en
el provisorato
Sábado 20
Mañana Misa Obispo y desfile de
personas
Llega de Madrid su hermano Álvaro
15:45 autopsia
17 h. traslado del féretro a la
Catedral (mozos de Mañeru). Responso
Cortejo fúnebre
18 h comitiva fúnebre llega al portal de la
Taconera. Responso
Capilla Cementerio capellán señor
Larequi entonó un responso
y acto seguido el féretro fue llevado al
panteón de canónigos en el que el cadáver del señor Seminario
recibió cristiana sepultura.
José Alonso 4, se instaló la
presidencia del duelo
2 comentarios:
Gracias Patxi, por contarlo todo con todo detalle.
Maite Seminario
Gracias a ti, Maite. Fue una historia que me apasionó
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