A Paco Gento (Guarnizo, Cantabria,1933-Madrid 2022), el extremo zurdo del Real Madrid, uno de los jugadores más verticales y veloces de su época, se le conocía -por su nacimiento y sus características- como "la galerna del Cantábrico".
Fue en el contexto del fútbol radiofónico donde yo escuché por primera vez esa misteriosa palabra.
Luego, a través de diversas lecturas, la fui asociando a su verdadero contexto:
Las galernas son temidas por los hombres de la mar por ser un fenómeno meteorológico de extremada violencia y que se han cobrado numerosas vidas entre los marineros.
Una de las más recordadas fue la galerna que se produjo el 20 de abril de 1878, tristemente conocida como "galerna del Sábado de Gloria" y que José María de Pereda recogería en su novela Sotileza.
"Hay una palabra seria, con regusto de sal y de lágrimas, un galicismo hondo y temible, sonoro y lúgubre, que va siempre enlazado a las gentes pescadoras del Cantábrico: la galerna" (Rafael González Echegaray).
La galerna de la que escapé
Entre 1979 y 88 estuve viviendo en San Sebastián. Un domingo vino a verme mi madre, con alrededor de 70 años, y la llevé a comer a un caserío de la zona de Igueldo con unas vistas impresionantes hacia el mar. Al terminar, tras pagar, salimos a ver el panorama. Hacía una tarde radiante. Por eso me llamó la atención una línea oscura en el horizonte, acompañada de una nube muy negra que venía del noroeste.
Yo nunca había visto una galerna pero sospeché inmediatamente y le pregunté al dueño si "eso" podía serlo. "Salid inmediatamente, voy a cerrar".
En los dos minutos que tardé en meter a mi madre en el coche, la tarde radiante se convirtió en casi una noche y con un viento terrible. Tuve que encender los faros del 4-L y por el retrovisor pude ver cómo eran tumbados algunos pinos.
Una explicación
He encontrado una explicación muy gráfica de este fenómeno que casi me cuesta un disgusto.
Es un fenómeno atmosférico único que solo se da en el litoral cantábrico. Se forma en la cadena montañosa del litoral asturiano -concretamente en el cañón submarino de Avilés, el nacedero de las galernas- y se desplaza por la línea de costa hasta disiparse tras entrar en el continente por la zona de Biarritz -el cementerio de las mismas-. GRÁFICO: F.J. BIENZOBAS
Se desplaza por la línea de la costa, de oeste a este, adentrándose unos 60 Kms. en el mar, hasta llegar a Guipúzcoa |
3 comentarios:
Acertado tema el de la galerna, desconocido fenómeno para los de tierra adentro. En google comenta la del 1961 y la de 1912.Sin embargo no encuentro nada de la de diciembre de 1911, hubo una con viento huracanado de suroeste que produjo en la costa francesa 52 naufragios. Entre ellos el del barco de mi abuelo con los 25 de tripulación muertos. El, que aunque ya capitán con 31años iba como primer oficial. A la entrada del estuario del Garona embarrancaron y murieron por los golpes contra el barco que les propicio la galerna.
Yo presencié la del 12 de julio de 1961. Tenía 10 años y estaba en la Colonia de Fuenterrabía. Recuerdo ponerse todo el mar gris en pocos momentos y avanzar unas olas enormes. Era la primera vez que escuchaba la palabra galerna.
Anamary Olaverri.
Gracias, Alfredo y Anamary, por vuestros testimonios
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