Ángel Inda, esta semana, con la bandurria que le acompaña a diario. JESÚS CASO |
Me alegré cuando ayer Pilar Fdez Larrea abrió la puerta de su página de Anónimos populares al amigo Ángel Inda. Será un buen empujón en su empeño de organizar la XV Concentración de Rondallas que el domingo 5 de Junio tendrá lugar en el Teatro Gayarre de Pamplona y a la que asistiremos de mil amores.
¡Enhorabuena, Ángel! Un reconocimiento muy merecido por tu dedicación altruista al mundo de la música.
ÁNGEL INDA ALONSO
¡Enhorabuena, Ángel! Un reconocimiento muy merecido por tu dedicación altruista al mundo de la música.
ÁNGEL INDA ALONSO
Llegó a tomar los hábitos con los Salesianos y los dejó.
Marcado por la muerte de un hijo, ha explorado mil oficios, vericuetos de
música, periodismo, hostelería y empresa. “Pero si eligiera sería reportero,
siempre”, confiesa sin atisbo de duda. Ahora la música, rondallas y el órgano,
llena sus horas. Estos días ultima el encuentro de rondallas del Gayarre.
DNI
Nació en Huarte, el 2 de marzo de 1943. Estudió en
Salesianos, tres años de Ciencias de la Información. Es graduado social y
maestro. Fue jefe de personal, periodista en varios medios, hostelero y es
músico. Padre de dos hijos, uno fallecido, y abuelo de tres nietos de 10, 9 y 5
años.
FRASES
PILAR
FDEZ. LARREA Pamplona
Ángel Inda ha sido hombre de
mil oficios, de currículum grueso y versátil, tal vez por eso es capaz de
condensar en una hora de conversación una trayectoria prolija como pocas. Va al
grano, sin apenas aderezos, sin licencias para el exceso en el relato de 73
años, los que ha cumplido, bañados en periodismo, empresa, hostelería y música,
con el trazo quebrado de una vida personal marcada por la muerte en un accidente
de moto de su hijo Jorge. Tenía 19 años y vestía de blanco y rojo en mitad de los
Sanfermines. La música es compañera de viaje y tal vez también bálsamo para este
hombre inquieto que nació el 2 del 3 del 43 y estos días anda bien atareado en organizar
la próxima concentración de rondallas del Gayarre. Será el 5 de junio.
Ángel
Inda Alonso es de Huarte, estudió con los Salesianos, de los 12 a los 23. Llegó
a vestir los hábitos. Y de ahí al uniforme, al verde caqui. La ‘mili’ le llevó
al Sahara y compaginó después trabajo y estudios. Llegó hasta tercero en
Ciencias de la Información. “Había que ir a clase, yo ya tenía dos hijos y no
podía con todo”, cuenta. Se matriculó en Graduado Social, en la UNED. Se
diplomó y también en Magisterio. “Pero, por encima de todo, me he sentido reportero”,
aclara. Porque siempre encontró vericuetos para dar acomodo a su vocación.
Trabajó
quince años como jefe de personal en Super Ser. Le tocó despedir a 750 personas.
La empresa cerró y él montó el Asador Iturrama. Fundó la revista La Perdiz y
escribió en la sección de Caza y Pesca de Diario de Navarra; también colaboró en
programas de radio y en la televisión, primero en Canal 4 y luego en Popular
Televisión, con el programa Al Rojo Vivo, donde desentrañaba de manera afilada
la actualidad de Osasuna sobre todo. Se jubiló con 67 años. Pero un periodista
no se acaba de retirar del todo, de modo que hace cuatro años inició un blog,
Al Rojo Vivo, que suma más de medio millón de visitas, 400 al día.
Es también entrenador titulado de fútbol, balonmano y ciclismo y durante 15 años organizó el Trofeo Boscos de verano.
Toda
esta trayectoria profesional la compagina siempre con la música. Aprendió con
los Salesianos, piano, acordeón y bandurria. Llegó a dirigir coros, fue
organista muchos años en Huarte, aún lo es en la iglesia de Mutilva, desde hace
15 años está en la rondalla Armonía y lleva 4 en la de Jus la Rocha. Ha tocado
con grupos de jotas y le gusta animar cualquier evento. Pero lo cuenta un poco
triste. “Las rondallas morirán con nosotros y el instrumento también”, describe
mientras acaricia su bandurria. Lamenta que no se enseñe en escuelas de música
e incluso en el conservatorio, como ocurre con otros instrumentos
tradicionales. Ve muy negro el futuro de la bandurria y del laúd. Quedará la
guitarra, pero no será lo mismo. Considera nula la implicación de las
instituciones para dar cobijo a una música que se extingue.
Ángel Inda con Pilar Fernández Larrea |
Pero
de momento les queda cuerda y la exprimen. “Esto sí es envejecimiento activo”, evidencia
Ángel. Ensaya cuatro días por semana, dos con cada rondalla, y tienen unas
cuatro actuaciones al mes. Entretienen a muchos mayores en residencias y clubes
y eso debe permitir dormir bien tranquilo por la noche. Pues no. “Uy, últimamente
tengo insomnio, pero es por la concentración del Gayarre, hasta que esté todo
bien atado no descansaré, o hasta que pase el día”, repara. Ha estado varias veces
a punto de colgar las botas, pero siempre se arrepiente. Se reunirán 30 rondallas,
más de 250 músicos. “Y merece la pena. El Gayarre tiene otro encanto. Baluarte será
más grande, pero más frío”, admite su querencia.
Pero
a pesar de todo y por encima de todo, Ángel se siente periodista. “Nunca
olvidaré aquel encuentro con Santiago Bernabéu”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario