miércoles, 12 de junio de 2024

Tarde de toros en Elizondo (julio de 1906)

Esta foto de Tadeo Viela tiene toda la pinta de ser de la gloriosa tarde de la crónica
Si en los años 60 El Cordobés acuñó el "salto de la rana", aquella tarde de 1906, en Elizondo, Bernalillo dio tres verónicas y un farol bailando la Mutildanza.

Tras la lectura de esta crónica, saco la conclusión de que la plaza no era fija (la habrían inaugurado) sino portátil. Y que fue la primera tarde de toros en el Baztán.
La banda "Recreo de Elizondo" (y el corresponsal) estaba muy al día de las últimas novedades: La Machicha es de 1905.
Lo mejor no estuvo en el ruedo sino en graderío: lleno a tope, chicas guapas y el "Recreo de Elizondo".
Hay una frase que no he entendido: "Después, algunos zulús hicieron de mulillas, cosa que debieran de hacer todos días". A saber...
Dudo de que J. P. H. (autor de la crónica) supiera el plural de "zulú" y el significado de "émulo".

Toros en Elizondo (1906 julio 27 El Eco de Navarra)
Banda Recreo de Elizondo, con el estandarte desaparecido 1. Francisco Cortea, presidente; 2. Cándido Albistur, director de la banda 1914. Fot. Echenique
Lo primero un aplauso á los organizadores Viela é Iribarren por haber, por primera vez, presentado en este valle la fiesta nacional; el público correspondió pon creces á la novedad, pues en la vida en el pueblo de Elizondo se había visto tanta gente ni tanta aglomeración de automóviles, coches y caballos. En la plaza el golpe de vista era hermoso: ni una de las localidades desocupada, y de muchachas, ¡cielo santo! parecía que nos habíamos trasladado a otro mundo, al mundo de la belleza, pues todas eran hermosas.
A las cuatro y media ocupa la presidencia el primer Alcalde del Ayuntamiento de Baztán don Joaquín Gamio, acompañado de varios concejales y del Alcalde de Elizondo don Ramón Lacoizqueta, y previa la señal, salen las cuadrillas al compás de La Machicha (1905 pincha), ejecutada por la brillante banda "Recreo de Elizondo", precedidos de los alguacilillos, el veterano Javier Lazcoz y el inconmensurable José Goyeneche, del espada Francisco Bernal «Bernalillo», y con las formalidades de rúbrica...
Mutildanza en Elizondo, de J.M. Iribarren
Sale el primer toro
, cárdeno, bien criado y con buenas púas. Bernal le da tres verónicas y un farol; todo ello bailando el .Mutilldanza (sic) y después de unos cuantos capotazos de los peones, se cambia el tercio y sale el hermano de Bernal, á quien, me parece, no ha llamado Dios por el camino del toreo. Después de sembrar varias banderillas, pone un par en la propia barriga. ¡Señores, todo es toro! 
Su compañero Chele, que parece azogue (inquieto), consigue poner tres medios pares que no llegan ni siquiera á un calcetín. 
Ya sale mi Bernal armado de muleta y estoque, brinda á la presidencia, se va al toro y después de cuatro pases por alto, dos naturales, pincha en hueso. El Chele, al ayudarle, sale revolcado y campaneado horrorosamente sin ninguna consecuencia; y sigue la faena, que se compone de unos muletazos y dos pinchazos más. (Aplausos).
El segundo toro. Se hace difícil el primer tercio, pues no atiende el bicho a los capotes y en cambio busca el bulto. Gracias á la habilidad de Bernal no fué éste cogido. En banderillas, el Chele puso un par y dos medios por lo cual se le aplaudió. Bernal brinda al palco del excelentísimo señor marqués de Álava, y después de dos pases por alto y uno en redondo, pincha en duro. Y sin más preparación, da la estocada de la tarde y descabello.
Ovación y regalo del señor marqués.
Portátil de Elizondo, años 30
Sale el tercero
, negro, bien armado, noble y bravo y Bernal aprovecha dando varias verónicas y una de farol. El Chele no queriendo ser menos intenta gallear, pero el toro no se arranca. Banderillean el Chele con un par y Bernal, al son del pasodoble "La tienta" (pincha), pone medio par y después, llegando como don Luís en sus buenos tiempos, puso un magnífico par de frente.
El Chele, después de varios floreos, pone otro par.
Sale Bernal á dar el fin de la fiesta y después de brindar al señor Goizueta (D. Román), da cuatro naturales, dos por alto y pincha en hueso; repite entrando recto y agarrando una estocada de efecto rápido. Ovación y oreja.
Después, algunos zulús hicieron de mulillas, cosa que debieran de hacer todos días.
Salimos de la plaza alegres y contentos á ver el baile. Y se despide este émulo de ustedes hasta pasado mañana, pues hay otra becerrada.
J. P. H.

1 comentario:

J-A. Zubiaur II dijo...

Yo creo -es un creer, porque no encuentro ratro- que «zulú» podría ser un localismo sinónimo de GURIPA, en el sentido que le da IRIBARREN (Vocabulanio navarro) y el DLE s.v. en la tercera acepción de golfante.