J.M. Iriberri: Mudanzas a la carta

El chalé de Caparroso, que el Cuatripartito quiere adjudicar a los okupas, con la pasarela del Labrit al fondo de la imagen. CALLEJA

Dice Asirón que a UPN le encantaría que se actuara como con el Euskal Jai, a porrazo limpio. Lo que quiere Pamplona es que se cumpla la ley, que la ley sea igual para todos, y que -ya que se ha creado un precedente- lo preceptivo es que abonen (de su bolsillo, claro) al resto de jóvenes el alquiler de las bajeras.

¿O es que aquí se premia al que delinque, si es de la cuerda?
Corrupción, prevaricación, complicidad y cobardía. 
Muuuuucha cobardía es lo que hay
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PLAZA CONSISTORIAL José Miguel Iriberri

MUDANZAS A LA CARTA

A los okupas les ha salido redonda la entrada ilegal en el número 3 de la calle Compañía, propiedad del Gobierno de Navarra. Al cabo de mes y medio, pasan a ocupar (ahora con ‘c’, es decir, legalmente) un inmueble del Ayuntamiento de Pamplona, cedido gentilmente por el gobierno tripartito (Bildu, Aranzadi e IE) con el apoyo de Geroa Bai. 

No se quejarán. Dejan una casa situada en el corazón de la Navarrería, cierto, pero pasan a un chalé precioso, en la cuesta de las Pasarelas y el club Natación. 

Algo parecido se leería en el anuncio de una inmobiliaria, al lado de una foto del inmueble, que está de muy buen ver, todo pintado en blanco con las persianas de madera en rojo.

Adjudicado. Un chollo para los futuros inquilinos. No tendrán a la puerta una panadería o un ultramarinos, pero tampoco darán ni sufrirán molestias por ruidos. Si hubieran okupado antes el edificio de la calle Compañía, sin esperar al 5 de diciembre, habrían pasado las Navidades en su nuevo y gratificante domicilio. De todas formas, lo recibirán ahora, pasada la cabalgata, como un obsequio de los (cuatro) magos municipales por su disposición para abandonar un inmueble en el nunca tenían que haber entrado. 

¿A qué vienen UPN y PSN dando la vara con las normas, el procedimiento y la igualdad de oportunidades de los ciudadanos? Aquí y ahora, el que se adelanta, canta. Y el que venga atrás, que espabile: tiempo y lugar ha tenido, una dos y tres, miro. Adjudicado. 

Al cuatripartito municipal sólo le falta hacerse cargo de los gastos de la mudanza para corresponder a lo que por lo visto consideran un encomiable desalojo de la casa de Compañía.

Y metidos ya en la ceremonia de la confusión, UPN y PSN deberían presentar un voto de agradecimiento al poder por la rapidez, laboriosidad y eficacia de sus gestiones para ceder el chalé, en lugar de criticar la arbitrariedad y el oscurantismo de la cesión, una auténtica pieza de museo municipal.