Si ya es indignante que un partido democrático no pueda dar un mitin en paz en lugares como Alsasua, Rentería.., aún lo es más que Podemos, nacido del Movimiento de los Indignados, acuse a los convocantes, en lugar de a los reventadores, de "incendiar la convivencia".
Por lo menos, el mitin de Rentería ha servido para desenmascarar a su alcalde, Julen Mendoza, ese hombre de paz (como Otegui) que. siendo de Bildu, organiza homenajes a las víctimas de ETA, el que busca el encuentro entre víctimas y victimarios, el que quiere incluir entre las víctimas del terrorismo, a los familiares de presos de ETA, muertos en accidente de tráfico.
Pura hipocresía. Éstas son sus palabras: "el acto de Ciudadanos en Rentería buscaba “generar provocación” (¿como las mujeres con minifalda?) para lograr votos “del Ebro para abajo”.
Más nos vale que Covite -siempre al quite- le ha quitado también la careta a Mendoza y pedirá, además, a la Audiencia Nacional que indague acerca de la responsabilidad del Ayuntamiento de Rentería en la cesión de una calle para homenajear a un etarra que ha cumplido condena.
19 asesinatos de ETA en esta localidad, 27 asaltos a la sede del PSE, han logrado su efecto: la eliminación o el silencio del disidente.
Por eso, las palabras de Maite son incendiarias y de una provocación insoportable.
Gracias, Maite, por tu provocación.
1 comentario:
Me acaba de llegar un correo de Maite Pagaza:
"Gracias a tiiiii"
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