lunes, 22 de agosto de 2016

Ruth Beitia, pianista y maestra de Oro


Ruth Beitia me ha enseñado, al menos, un par de cosas.
Siempre he pensado que era difícil ser amigo de alguien con quien compites a muerte. Ella en cambio es capaz de combinar con toda tranquilidad amistad y rivalidad.
Cuando hace cuatro años estuvo en Pamplona, participando (su venida sonaba a despedida. De hecho, el Marca del 24.08.12 así lo recogió.) en el Campeonato de España de Atletismo que se celebró en nuestra ciudad, tuve la ocasión de saludarla, grabarla y comprobar el buen ambiente que reinaba en el foso de altura.
Me lo demostró con Marta Mendía. Cuando la navarra Marta reinaba en la altura y Ruth empezaba, yo creía que iban a tener mucho pique entre ellas, porque muy pronto Ruth empezó a hacerle sombra y a superarla. Aluciné cuando me enteré de que se habían hecho amigas y Marta invitaba a Ruth a fiestas de Salinas (Es Salinas de Ibargoiti, no Idocin, como he puesto al principio. ¡Están tan cerca!)
El técnico Ramón Torralbo, felicitando
a una emocionada Ruth Beitia. REUTERS
En el vídeo vais a ver unos cuantos detalles preciosos de Ruth animando, aplaudiendo y llorando con sus rivales. ¡Increíble1
Otro aspecto que para mí es también asombroso es su alegría. Puede dar la impresión de que le falta un tornillo cuando la ves hablando con el listón y diciéndole cosas, o dando conciertos de piano a una sola mano antes del salto. Pero siempre, siempre, está sonriendo. Cuando las demás tuercen el gesto por la tensión, Ruth parece haber superado esa fase.
En agradecimiento a tus enseñanzas, Ruth, quiero dedicarte este vídeo. Para hacerlo más breve, he tenido que quitar -con mucha pena- bastantes escenas entrañables. A pesar de todo, dura 8.30. Demasiado largo en estos tiempos de prisas.
Le he puesto (en origen no hay locutor) una música que creo que te gustará: las dos canciones más bellas de los últimos años de tu Cantabria del alma. Y para terminar, el himno no oficial de nuestra querida patria: Suspiros de España. A ver si te gusta.
Gracias por todo

2 comentarios:

Echenique dijo...

El gran triunfo de Ruth Beitia se produjo en una noche fabulosa. Hubo carreras con caídas y tropezones. Hubo desenlaces sorprendentes, como la victoria de Centrowitz en el 1.500. Y otros más previstos, como el oro de Semenya y Farah. Por encima de todos esos acontecimientos voló Ruth Beitia. Saltó hasta el oro (1,97m) y culminó su gran obra.

Ya lo ha ganado todo. Tiene tres oros europeos. Un bronce mundialista. Y ahora, la guinda.

“Despertando para soñar”.

Anónimo dijo...

brutal. Y no digamos nada Carolina la de Badminton. Y el logroñesico bronce en BTT con 34 añazos. Ejemplares todos ellos!!