Remírez (por la viuda de Beiro): "Es que es de Vox". ¿Y la exparlamentaria de HB que tienes al lado? |
Yo la vi por José Ignacio Palacios
En su etapa de ministro del Interior, cuando él o el Gobierno al que pertenecía recibía alguna crítica adversa por parte de las víctimas del terrorismo, Jaime Mayor Oreja respondía: “Las víctimas siempre tienen razón”. Por el contrario, el vicepresidente del Gobierno de Navarra y portavoz del Gobierno, Javier Remírez Apesteguía, ante la negativa de la viuda del cabo Beiro a saludar a la presidente Chivite en el homenaje a su marido -porque no la consideraba “grata”-, lo que hizo fue descalificarla diciendo que actuaba “condicionada” por su ideología política. Y esto lo dijo en una rueda de prensa, teniendo sentada a su izquierda a la consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Itziar Gómez López.
El 25 de septiembre de 2002 asistí en Sama de Langreo al funeral de Juan Carlos Beiro, asesinado el día anterior en Leiza, y allá sentí muy de cerca el dolor de una familia rota y desconsolada y el llanto de una viuda joven y de dos niños de cinco años que habían quedado huérfanos de padre. Desde entonces han pasado 17 años y siempre que he podido he acudido a Leiza para asistir al homenaje que, año tras año, le organizan a Beiro ‘Vecinos de Leiza’ y al que jamás ha faltado su viuda, María José Rama, y familia.
Recuerdo que, después del incidente que ésta tuvo con la presidente Barkos en 2015, pidió al Gobierno de Navarra que no acudiera, alegando para ello que no le parecía “lógico”.
Ahora ha cambiado el Gobierno y la nueva presidente, que ha accedido al cargo gracias a la abstención de EH Bildu y ha propiciado que esta coalición se haga con la alcaldía de Huarte, se presentó en Leiza y la viuda, que parece ser más consecuente que ella, le negó el saludo y, ya sabemos, como decía Jaime Mayor… “las víctimas siempre tienen razón”.
No dudo que el vicepresidente Remírez recordará que once años antes del asesinato de Beiro, el 6 de julio de 1991, por primera vez en su historia, el Riau-Riau no llegó a salir a la calle.
Y supongo que su madre, la entonces concejal Asun Apesteguía, le habrá contado las dos largas horas de angustia que allá vivió ella y el resto de la Corporación hasta que pudo abandonar el Ayuntamiento por la puerta trasera.
Y no dudo que recordará que esa tarde un grupo de jóvenes violentos asaltó el Ayuntamiento de Pamplona y con petardos de gran potencia y con los maderos procedentes del vallado del encierro trataron de derribar la portezuela contigua a la entrada principal para entrar y linchar a los ediles.
Y sabrá de la magnífica actuación de la Policía Municipal con unos agentes que, desde dentro, desde el zaguán de la Casa Consistorial, protegieron esa puerta con todo tipo de muebles, mesas y sillas, para atrancarla, y otros, desde fuera, vestidos de pamplonica, que hicieron labores de información.
Sabrá que uno de estos fue reconocido y linchado con palos y a patadas y que acabó en la UCI y que otros policías resultaron también heridos.
Sí, fueron dos largas horas angustiosas y terribles en las que lanzaron botes de humo al interior del zaguán y, a los gritos de “Caña, caña, caña, esto no es España” y “Nafarroa Euskadi da”, embadurnaron una fachada que estaba recién restaurada, pintando en su puerta principal inscripciones tales como ‘ETA’, ‘Amnistía’ y la ‘A’ de "ácrata".
Los destrozos fueron grandes, los dos leones situados a ambos lados del escudo de Pamplona fueron arrancados y al día siguiente se podía leer en la prensa local: “Hacia las 19,30 de la tarde, el zaguán del Ayuntamiento de Pamplona era más propio de alguna escena sacada de la Revolución Francesa o de la de octubre de 1917”. Nadie me lo ha contado. Fui testigo de todo lo que allá sucedió desde un lugar privilegiado: desde un balcón de Casa Seminario.
Y no dudo que recordará que esa tarde un grupo de jóvenes violentos asaltó el Ayuntamiento de Pamplona y con petardos de gran potencia y con los maderos procedentes del vallado del encierro trataron de derribar la portezuela contigua a la entrada principal para entrar y linchar a los ediles.
Éste de 1985 era el Riau-Riau habitual de HB-Bildu |
Sabrá que uno de estos fue reconocido y linchado con palos y a patadas y que acabó en la UCI y que otros policías resultaron también heridos.
Sí, fueron dos largas horas angustiosas y terribles en las que lanzaron botes de humo al interior del zaguán y, a los gritos de “Caña, caña, caña, esto no es España” y “Nafarroa Euskadi da”, embadurnaron una fachada que estaba recién restaurada, pintando en su puerta principal inscripciones tales como ‘ETA’, ‘Amnistía’ y la ‘A’ de "ácrata".
Los destrozos fueron grandes, los dos leones situados a ambos lados del escudo de Pamplona fueron arrancados y al día siguiente se podía leer en la prensa local: “Hacia las 19,30 de la tarde, el zaguán del Ayuntamiento de Pamplona era más propio de alguna escena sacada de la Revolución Francesa o de la de octubre de 1917”. Nadie me lo ha contado. Fui testigo de todo lo que allá sucedió desde un lugar privilegiado: desde un balcón de Casa Seminario.
Dos días después, el 8 de julio, y desde la cama del hospital, el alcalde Jaime declaró a una emisora de radio: “Es cierto y está demostrado y corroborado y los vídeos que tenemos demuestran, que es una parlamentaria de HB la que estaba dirigiendo a las huestes que tenían abajo, por lo menos moviéndose, dirigiendo. Santiago Cervera (entonces concejal), que ha visto los vídeos, dice eso y será cierto”.
Pues bien, la hoy consejera Itziar Gómez, la misma que el vicepresidente Remírez tenía a su lado cuando descalificó a la viuda de Beiro, en ese momento era parlamentaria de HB (con Patxi Zabaleta, Adolfo Araiz, Mauricio Olite y Floren Aoiz). Yo sé quién era esa “parlamentaria” de la que hablaba el alcalde Jaime, porque la vi, y no dudo que Itziar Gómez también recordará quién era.
[Ésta es la penúltima hazaña de Itziar Gómez, un mes antes de la comparecencia con Remírez
Pues bien, la hoy consejera Itziar Gómez, la misma que el vicepresidente Remírez tenía a su lado cuando descalificó a la viuda de Beiro, en ese momento era parlamentaria de HB (con Patxi Zabaleta, Adolfo Araiz, Mauricio Olite y Floren Aoiz). Yo sé quién era esa “parlamentaria” de la que hablaba el alcalde Jaime, porque la vi, y no dudo que Itziar Gómez también recordará quién era.
[Ésta es la penúltima hazaña de Itziar Gómez, un mes antes de la comparecencia con Remírez
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El vicepresidente Remírez ha demostrado tener una doble vara de medir. Para él una víctima del terrorismo que ha ocupado un puesto de relleno en una lista electoral de Vox está descalificada para siempre, mientras que una que ha sido cargo electo de Herri Batasuna -parlamentaria-, tras su paso por Aralar y su aterrizaje en Geroa Bai, ha quedado limpia de polvo y paja y con ella no hay ningún reparo para pactar o tenerla de compañera en el mismo equipo de Gobierno.
Me da que Remírez no quiere saber nada de lo que aquí cuenta Palacios |
¡Así escriben algunos la memoria histórica!
José Ignacio Palacios Zuasti
Exconsejero foral
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