jueves, 15 de noviembre de 2018

Skolae y la Chula Potra

Aunque hay muchas más, me quedo con la respuesta de Alejandro Sanz:
“Viva la música por encima de las censuras. De todas las censuras. Jamás nos callarán porque nacimos para abrazar a los que tienen alma y joder a los que no la tienen”. 
¿Oído, Gobierno desalmado de Navarra?
Hoy presento una de las tres canciones que más promueven la violencia (de género o no), que hemos padecido en esta tierra navarra sin que Skolae haya tenido la valentía (claro, son de su cuerda) de incluirlas en su lista de "No me cantes violencias".

La dignidad de una Barcina merengada es mayor, si
cabe, que la Bil(d)eza de sus agresores
La Bofetada (Julieta Itoiz, ‘La Chula Potra’)
Bildu abrió su campaña con un rap que daba una bofetada a Barcina 
Ahora que el Gobierno del cuatripartito propone a los alumnos su lista de canciones sexistas o que promueven la violencia de género, es curioso (más que curioso, obligatorio) recordar la canción que eligió uno de sus socios, EH Bildu, para abrir su campaña electoral en 2015. 
En la Plaza Consistorial de Pamplona la rapera pamplonesa Julieta Itoiz, ‘La Chula Potra’, cantó La Bofetada, la canción que dedicó a Yolanda Barcina y por la que la entonces alcaldesa de Pamplona la llevó a los tribunales, sobreseyendo éstos la demanda al no ver injurias. 
“Una bofetada que te espabilara tu borrachera de pija fulana, te sacara del tiesto, mujer florero, del capital, la puta más cara. Una bofetada para partirte el útero, buen aire te meta, que te estremezca, te haga hembra a ti, la yupi seca”. 
Mientras cantaba, Joseba Asirón, actual alcalde, sonreía tras ella. 
“Una bofetada dedicada a Barcina, buen comienzo para el acto de @EHbilduNafarroa #aldaketa #nafarrokgaraile”, resumió en Twitter el exdirigente abertzale Floren Aoiz.
Por cierto, Tere Sáez, tan preocupada por la "pederastía" (sic, así lo dice ella), no ha dicho ni 'Pamplona' al ver a los niños coreando las amenazas de la Chula Potra a la, entonces, Alcaldesa de la ciudad.
Nota: Que nadie piense que el estribillo, lo único realmente bueno (... ¿Dónde estás, dónde estás Yolanda? ¿Qué pasó, qué paso, Yolanda? Te busqué, te busqué, Yolanda. Y no estás, y no estás, Yolanda), es de la Chula Potra. Es del peruano Manuel Jiménez Fernández. 

Lo de la Potra es un plagio de esa vieja y hermosa canción con la que se enamoraron nuestros padres. La Sgae debería tomar también cartas en este asunto, casi tan vergonzoso, como lo que viene a continuación:

La bofetada (o "Dejad que los niños se acerquen a mí)
Quisiera escribirte un rap que fuera como una bofetada
sin venganza sin rencor sin revancha
de hermana a hermana.
Una bofetada que te espabilara tu borrachera de pija fulana
te sacara del tiesto, mujer florero,
del capital, la puta más cara.
Que te perpetrara un resquicio en tu cabeza de chorlito, 
entrara el olor de la injusticia 
superponiéndose a tu Chanel nº 5.
Una bofetada que te despertara de tu sueño de hormigón y de cemento, 
que recordaras que andar por la vida mancha, 
que currar para comer puede ser un infierno.
Convertirte en tu asistenta, mandarte a la compra, te miren mal por
extranjera, dejarte la cartera sin una perra a día 20 
y más, tu marido te pega.
Una bofetada en tu boca deslenguada, hacer sitio al idioma de la mujer
liberada, que no repite el discurso del amo, que no necesita mentir ni
violar la palabra,
que abriera tus ojos, alcanzaras a comprender lo irreversible, lo que
no vuelve por tus acciones inconscientes de la bienpagada
Yolanda, su madre, director tesis, y su hijo
Por cada árbol cortado serían más de ochenta,
Por las ilusiones mutiladas nadie podría llevar la cuenta. Por tu prepotencia, tu
incompetencia, tu tolerancia, tu complacencia
Por los desengañados, menospreciados, olvidados, los encarcelados
Por la lengua de mis antepasados.
Por las huertas arrasadas, las tapias derribadas
Por humillar al río, calentar el cielo, aplastar la hierba con asfalto y hierro
Una bofetada para partirte el útero,
buen aire te meta, que te estremezca, te haga hembra a ti, la yupi seca,
Con un orgasmo perdieras la compostura, te devolviera a la vida, ablandara tu cara dura,
bruja mala, fría, calculadora
Quisiera escribirte un rap que fuera como una bofetada,
Y de pronto te sintieras humana y no soportaras tu vida ni la de tu banda
Con Vargas Llosa
Te abandonaras, salieras a la calle a mezclarte con la mara,
Explotara la coraza de tu alma
No te cortaras, lloraras por cada una de tus jugadas
Empezaras a querer a la Tierra, su bendita balada
¿Dónde estás, dónde estás Yolanda? ¿Qué pasó, qué paso, Yolanda? Te busqué, te busqué, Yolanda. Y no estás, y no estás, Yolanda.
Aburridora, amargada, mala mujer, mala paya
Estaría encantada de darte una bofetada,
Sin pedirte a cambio nada, regalada, y rebotada de tu pedestal de vestal acomodada
descubrieras la elegancia que no conoce violencia, la cultura del sentimiento y del pueblo, la libertad y la ternura.
Que no te enteras, chavala, que la vida no es esto, hostias.
Que nos dejes de joder con tanta chorrada
Una bofetada y se esfumara la fuerza de seguridad y así, ¿qué ordenanza hay que cumplir?
Te digo yo, ¿cómo ibas a presumir de lo que has hecho?:
la Constitución, España y toda tu mierda del Estado de derecho.

Si deseas conocer el contexto de este rap, pincha en:

Del Euskal-Jai a "Una bofetada"

No hay comentarios: