Tiene que ser terrible homenajear a M.A. Blanco con quienes no condenan su asesinato |
En nuestras manos está promover una regeneración para darles su merecido en las urnas
Degradación, por Rafa Berro
Contra ese olvido precisamente está jugando un papel la
exitosa novela Patria, porque nos ha dado a muchos lectores un cuadro realista
del mundo sórdido, moralmente degradado, humanamente insoportable, sin
libertad... creado por ETA y sus apoyos (ahora en Bildu) en Euskadi y Navarra y
que aún padecemos. Ese mundo asesinó a Miguel Ángel Blanco y a cientos más.
También el libro "Lo difícil es perdonarse a uno mismo", de Iñaki Rekarte, nos
muestra ese mundo degradado. Rekarte es un exetarra arrepentido que ingresó en
la banda a los 19 años y colaboró en el asesinato de un traficante de drogas en
Irún y asesinó a tres civiles en Santander con coche bomba destinado a una
furgoneta ocupada por guardias civiles.
El libro de Rekarte no ha sido un best
seller como Patria, pero merece la pena. Pone al lector en contacto no con una
ficción que refleja la realidad sino con la realidad misma, con ese mundo
atroz. Su interés sobrepasa lo literario: lo importante ahí es la vida que está
en sus páginas. La vida de una persona y de una sociedad enfermas de
nacionalismo. Rekarte cuenta cómo a los 19 años entró en la banda sin saber muy
bien por qué. En Rekarte se da una paradoja: por un lado, asesino de ETA; por
otro, víctima de ETA y de una sociedad enloquecida por el abertzalismo.
El libro de Rekarte nos recuerda lo fácil
que es a veces cometer errores gravísimos en la vida, atravesar puertas que nos
llevan a un camino de perdición y que una vez atravesadas se cierran y nos
resulta muy difícil retroceder y cambiar de ruta (...).
Quien intentó matar a nuestro amigo Miguel Ángel Ruiz de Langarica, recibido como héroe en Pamplona |
Por el contrario, los etarras que no se
arrepienten o los de Bildu que hacen lo mismo, subjetivamente no aceptan culpa
alguna y no necesitan el perdón o incluso lo desprecian. Recuerdan a los nazis
tras la guerra en la película "Portero de noche", que hacían lo mismo, pero
objetivamente son culpables, no tienen perdón y son moralmente indignos.
Por eso Geroa Bai, IU y Podemos han degradado moralmente la política
foral en esta legislatura convirtiéndola en una indecencia al aliarse con
Bildu, al tratarlo como un igual, al darle la Alcaldía de Pamplona y otras. Y
como eso se ha hecho para que Barkos sea presidenta, ella es la máxima responsable,
¿y por tanto la más autodegradada? En cualquier caso, es responsabilidad
nuestra promover una regeneración que dé su merecido en las urnas a esos
partidos y a la responsable última de la degradación que padecemos.
RAFAEL BERRO ÚRIZ, filósofo, es el autor de este artículo
No hay comentarios:
Publicar un comentario