martes, 31 de mayo de 2011

Del Euskal-Jai a "Una bofetada"


Ella es Julieta, Julieta Itoiz, "La chula potra". Él, Mikel, un ángel. Los dos aparecen como dos chicos encantadores... e indignados, pero que muy indignados.
En este vídeo intentan explicarnos el porqué de su odio a Yolanda Barcina y cómo ese odio lo subliman en la canción (?) que ya conocéis: "Una bofetada".
Y el porqué de tanto odio está en lo que ocurrió con el gaztetxe instalado en el antiguo frontón "Euskal jai".


Un poco de historia
El Euskal-Jai fue un frontón situado en el casco viejo de Pamplona. Se inauguró en 1909 y se mantuvo con una programación estable hasta 1977. En el año 1994 fue ocupado por I.G.A. (Iruñeko Gazte Asanblada), un colectivo que "denunciaba la falta de atención a la juventud, sobre todo debido a la inexistencia absoluta de locales autogestionados". Desde 1977 hasta 1994 el local había estado desocupado con las consecuencias negativas (especialmente para los solares colindantes) que cualquiera puede imaginar.
Por aquella época se quejaba IGA de que el Ayuntamiento de Pamplona (entonces presidido por Alfredo Jaime) no cedía locales municipales para proyectos autogestionados.
Ante dicha negativa se ocupó el frontón que pertenecía a Euskal Jai S.A.
Durante el primer año hubo tres intentos de desalojo que fracasaron. El Euskal-Jai mantuvo una actividad como gaztetxe hasta el 2004, año en el que, al haberse convertido en propiedad municipal, fue desalojado y derribado por el Ayuntamiento (presidido por Yolanda Barcina). Hoy se levanta allí el Aquavox municipal "San Agustín".


Puntos de reflexión
1. No se puede pedir (y menos exigir) un local municipal para unas actividades autogestionadas. Es evidente que la obligación del Ayuntamiento es velar por que los bienes y fondos municipales tengan un empleo adecuado. Es por tanto un derecho y un deber suyo controlar las actividades que allí se realizaran. Local municipal, fondos públicos y autogestión son incompatibles.
2. Queda muy bonito eso de que "el Euskal-Jai era un lugar alternativo de encuentro...", pero, ¿quién pagaba los recibos? No parece muy "alternativo" mamonear enganchando la luz, pinchando el agua... especialmente si se trata de servicios municipales.
3. Algo parecido podemos decir del "bar-comedor". Suena a competencia desleal con los bares de la zona que pagan sus impuestos y cumplen con sanidad.
4. En cuanto a sus fuentes de financiación (bar, barraca de sanfermines, propaganda), la barraca fue un chollo que, gracias también a Yolanda, se les acabó. ¿Por qué ellos iban a tener ese privilegio, mientras los demás feriantes tenían que pujar para conseguirlo? Lo que pretendían era lucrarse a través del Ayuntamiento, beneficiándose de un espacio público y pretendiendo que el Ayuntamiento les cediera ese terreno para instalar una barra de bar sin pagar impuestos y sin concurso público.
5. Hablan del apoyo de los vecinos y de que el desalojo "fue un acto de violencia contra todo el barrio". Pero, yo he leído por ahí que "quitando a los de la tienda de enfrente creo que se pueden contar con los dedos de una mano los vecinos que defendían el gaztetxe" (Triky).
6. En cuanto a las "diferentes sensibilidades", basta ver las actividades que se realizaban (huelga de hambre a favor de "l@s pres@s vasc@s", Kalejira, encarteladas contra la política especulativa de A. Jaime...) o los colectivos que participaban (Jarrai...) para hacerse una idea de la amplitud del abanico.
7. Mientras el Euskal-Jai fue propiedad particular y abandonado a su suerte, aún se entiende la ocupación. Pero desde el momento en que se convierte en propiedad municipal y se les pide que desalojen, se acabaron las excusas para permanecer allí.


8. Cuando, en 2004, vieron las orejas al lobo del desalojo, decidieron de repente reconvertir el espacio del frontón en una plaza autogestionada por el vecindario del Casco Viejo. Incluso, el mismo día del desalojo tenían prevista la entrega de las llaves del Euskal a la Asociación de Vecinos. Lo siento, pero suena demasiado a búsqueda desesperada de "escudos humanos".
9. En cuanto a la actuación policial para el desalojo, ésta no habría tenido lugar si se hubiera desalojado pacíficamente. A los "okupas" no les importó tomar como rehenes a los vecinos del Casco Viejo que tuvieron que soportar varios días de incomodidades y tensiones. Quienes estaban dentro no eran precisamente unos "angelitos". Estaban perfectamente preparados para un asalto al gaztetxe: ventanas y puertas chapeadas, material de autodefensa... Se mostraban especialmente orgullosos del «bunker aero-espacial» de más de 3.000 kg. de peso que colgaba de la estructura del frontón. Pero también estaban apoyados desde fuera del mismo. Supongo que no hará falta recordar que en un país democrático es el Estado el único que está legitimado para usar la violencia.


10. Llamó mucho la atención la cobertura que del desalojo hizo la ETB, poniéndose del lado de los desalojados. Sin duda, tuvo algo que ver el hecho de que fuera una corporación de UPN y la policía nacional quienes lo clausuraran. Cuando, en localidades de Euskadi, eran el PNV y la Ertzaintza quienes desalojaban, la ETB no aparecía.
En resumen, el gaztetxe del Euskal no fue "un grupo de jóvenes inquietos que querían realizar su sueño, sus ilusiones". No fue eso. No es cierto lo de "todo empezó con odio". Todo empezó porque quisieron adueñarse de un local que era propiedad del Ayuntamiento y, además, plantearon un reto al poder municipal, al estado de derecho y a los valores democráticos. 
Y, gracias a la determinación de Yolanda Barcina, perdieron el órdago.

martes, 24 de mayo de 2011

¡Señor juez, por favor!

 2º por la derecha, Fermín Otamendi
De verdad, me da verdadero asco tener que mostrar en mi blog la letra del rap que la "ciudadana" Julieta Itoiz ha dedicado a Yolanda Barcina, pero, el archivo de la querella por parte del juez Fermín Otamendi ha producido en mí tal asombro que no puedo menos de compartir mi extrañeza con vosotros.
Hace unos cuantos años Pedro Pacheco, alcalde por entonces de Jerez, estuvo a punto de tener un disgusto por decir la hoy famosa frase "la Justicia es un cachondeo". El mismo Otegui pasó sus apuros cuando llamó al Rey Juan Carlos "Jefe de torturadores".
Estas frases son hoy ridículas si las comparamos con las lindezas que la Chula potra dice de Yolanda.
Veamos (aguantad las ganas de vomitar) la "letra" (encima es superlarga).
(ya perdonaréis la ausencia de puntos, comas... pero no quiero perder ni un minuto adornando esta canallada):
La bofetada
Quisiera escribirte un rap que fuera como una bofetada
sin venganza sin rencor sin revancha
de hermana a hermana.
Una bofetada que te espabilara tu borrachera de pija fulana
te sacara del tiesto, mujer florero,
del capital, la puta más cara.
Que te perpetrara un resquicio en tu cabeza de chorlito,
entrara el olor de la injusticia
superponiéndose a tu Chanel nº 5.
Una bofetada que te despertara de tu sueño de hormigón y de cemento,
que recordaras que andar por la vida mancha,
que currar para comer puede ser un infierno.
Convertirte en tu asistenta, mandarte a la compra, te miren mal por
extranjera, dejarte la cartera sin una perra a día 20
y más, tu marido te pega.
Una bofetada en tu boca deslenguada, hacer sitio al idioma de la mujer
liberada, que no repite el discurso del amo, que no necesita mentir ni
violar la palabra,
que abriera tus ojos, alcanzaras a comprender lo irreversible, lo que
no vuelve por tus acciones inconscientes de la bienpagada
Por cada árbol cortado serían más de ochenta,
Por las ilusiones mutiladas nadie podría llevar la cuenta. Por tu prepotencia, tu
incompetencia, tu tolerancia, tu complacencia
Por los desengañados, menospreciados, olvidados, los encarcelados
Por la lengua de mis antepasados.
Por las huertas arrasadas, las tapias derribadas
Por humillar al río, calentar el cielo, aplastar la hierba con asfalto y hierro
Una bofetada para partirte el útero,
buen aire te meta, que te estremezca, te haga hembra a ti, la yupi seca,
Con un orgasmo perdieras la compostura, te devolviera a la vida, ablandara tu cara dura,
bruja mala, fría, calculadora
Quisiera escribirte un rap que fuera como una bofetada,
Y de pronto te sintieras humana y no soportaras tu vida ni la de tu banda
Te abandonaras, salieras a la calle a mezclarte con la mara,
Explotara la coraza de tu alma
No te cortaras, lloraras por cada una de tus jugadas
Empezaras a querer a la Tierra, su bendita balada
¿Dónde estás, dónde estás Yolanda? ¿Qué pasó, qué paso, Yolanda? Te busqué, te busqué, Yolanda. Y no estás, y no estás, Yolanda.
Aburridora, amargada, mala mujer, mala paya
Estaría encantada de darte una bofetada,
Sin pedirte a cambio nada, regalada, y rebotada de tu pedestal de vestal acomodada
descubrieras la elegancia que no conoce violencia, la cultura del sentimiento y del pueblo, la libertad y la ternura.
Que no te enteras, chavala, que la vida no es esto, hostias.
Que nos dejes de joder con tanta chorrada
Una bofetada y se esfumara la fuerza de seguridad y así, ¿qué ordenanza hay que cumplir?
Te digo yo, ¿cómo ibas a presumir de lo que has hecho?:
la Constitución, España y toda tu mierda del Estado de derecho.

El juez aprecia que en esos insultos no hay ánimo de injuriar sino de criticar la gestión política de la alcaldesa.
Considera también que esas expresiones no aparecen como manifiestamente innecesarias para expresar la opinión de Julieta "de forma popular y barriobajera". Si yo no entiendo mal, lo que "no aparece como manifiestamente innecesario" es que "puede ser necesario". O sea, que la inclusión de toda esa sarta de insultos no ha sido un capricho de la Potra, sino que, casi casi, lo exigía el guión.
Me llama también la atención que, según el juez, todos esos "piropos" (que en otros contextos o en solitario serían claramente injuriosos) aparecen "en un contexto claramente político en el que constantemente se afirma que la destinataria del rap se ha vendido al capital o al sistema". Sr. Juez, ¿puede decirme dónde está ese dichoso contexto político? ¿Os imagináis a un alumno llamádole hijo de puta a su profesor porque en su manera de dar clase, de exigir atención, de poner un examen... "se ha vendido al sistema"?
Lo más increíble es cuando el Juez se pone a analizar en detalle algunos de los insultos. Por ejemplo, cuando dice que Yolanda es "del capital, la puta más cara". Y llega a esta conclusión increíble: "Desde el momento en que se añade 'del capital', la expresión deja de tener su significación injuriosa (no se pueden tener relaciones sexuales mediante precio con "el capital") y se convierte en una metáfora". A ver si lo he entendido bien. Si alguien dice de la Chula potra que es "del Euskal, la meretriz más barata", ¿es también una metáfora, ya que no se pueden tener dichas relaciones con el Euskal? De locos.
Sr. Juez, sólo espero que su hija, su mujer o su madre (si las tiene) no ocupen nunca cargos públicos y alguien, en su derecho a la libertad de expresión, les dedique semejantes jaculatorias.
Y hablando de contextos, Sr. Juez, eche una ojeada a esta "sesión infantil" de la Chula potra en la calle Descalzos, en Carnavales. Yo lo titulo así:

DEJAD QUE LOS NIÑOS SE ACERQUEN A MÍ

A pesar de todo, de la desconfianza que este tipo de sentencias generan hacia la Justicia, desde este blog animamos (y estamos convencidos de que lo hará) a nuestra alcaldesa a que presente recurso.
Y que lo gane, por el bien de la verdad, de la justicia y, sobre todo, del sentido común.

Por cierto, que nadie piense que el estribillo, lo único realmente bueno (... ¿Dónde estás, dónde estás Yolanda? ¿Qué pasó, qué paso, Yolanda? Te busqué, te busqué, Yolanda. Y no estás, y no estás, Yolanda), es de la Chula potra. Es del peruano Manuel Jiménez Fernández.  Lo de la Potra es un plagio de esa vieja y hermosa canción con la que se enamoraron nuestros padres. La Sgae debería tomar también cartas en el asunto.

Noticias (extraídas del Diario de Noticias) sobre el movimiento 15 M en Pamplona: el domingo 22 actuó en la Plaza del Castillo "la rapera La chula potra". Lástima no haber estado allí porque, imaginando qué cantó, me habría gustado ver la reacción de la mara. De todas formas no me da buena espina que la hayan invitado. 

Me hace gracia que llame este medio (DNN) "rapera" a quien no ha (des)hecho más que un rap. Por matar un perro me llaman mataperros.


domingo, 22 de mayo de 2011

Gracias, Yolanda


Gracias por los doce años de tu vida que nos has regalado a los pamploneses. Doce años de dedicación exclusiva, sin haberte cogido nunca una baja, sin fallar a ningún acto oficial. Dedicados, día y noche, a Pamplona.
Gracias por tu impecable gestión, por la transformación profunda de Pamplona, de barrios como la Rochapea; por las peatonalizaciones, por haber eliminado los coches de las calles del Casco Antiguo reurbanizándolo.
Gracias por el Paseo fluvial, por los ascensores, rampas, pasarelas, carril bici (muy mejorable), las murallas remozadas...
Gracias por la inversión en cultura y en educación, multiplicando el número de plazas en escuelas infantiles y creando una red de centros culturales: los Civivox.
Gracias porque, con todo ello, Pamplona es reconocida hoy como una de las ciudades con mayor calidad de vida. Así lo señala el estudio de la OCU.


Pero, sobre todo, te agradezco:
Tu actitud firme frente a ETA y sus apoyos. A pesar de (o, mejor, por) ser objetivo de ETA, siempre has estado ahí, en todas las concentraciones, para abrazar a los familiares de las víctimas del terror.
Que les hayas quitado las mal llamadas "barracas políticas", de las que nos expulsaron violentamente a los demás.
Que hayas recuperado para todos los pamploneses ese Euskal Jai que algunos quisieron privatizar (eso sí, todo muy autogestionado) para sus propios intereses.
Que hayas eliminado del recorrido del encierro todas las ikurriñas que impedían verlo cómodamente por televisión.
Que hayas exigido fianzas a los olentzeros para evitar que se convirtieran en actos de apoyo a los presos de ETA.
Que hayas acudido a todas las asociaciones de vecinos a explicar tus proyectos para los barrios.
Que con tu presencia, muchas veces jugándote el tipo, hayas ido consiguiendo recuperar el Riau riau que nos quitaron a los pamploneses y que ahora esos mismos reivindican.
Que ante los intentos de agresión, los insultos ("¡Hijaputa!"; "Barcina a la cocina"; "Barcina a la guillotina"; "La última puta del Ben-Hur es la Barcina, es la Barcina..."), muestra del machismo y del nivel de inteligencia de lo más cutre de las Peñas (y de la cobardía del resto), hayas respondido siempre con una sonrisa.
Que, con todo ello, te hayas convertido en el pararrayos de las iras de esa misma gente (así nos toca a menos a los demás). Yo, en su disculpa, personalmente pienso que nunca te han tenido cerca, que nunca han cruzado unas palabras contigo.
Y gracias por tu cercanía; por saludar a la gente como si no llevaras escolta. Por tu envidiable vitalidad, capacidad de trabajo. Y, eso, a pesar de (sobre todo en Sanfermines) haber descansado muy poco.


Bueno, hay algo que no te perdono. En las tardes de los Sanfermines había en Pamplona, en la calle Amaya, un oasis en el que los críos disfrutaban de kilikis, torico de fuego... Y había una charanga que funcionaba a base de pulmón y corazón. Eran las tardes del Cali. Y les pediste un seguro que no podían cubrir. Pero dijiste que la ley era igual para todos. ¡Con lo agusto que habrías ido allí con tu hijo!

Y nada más. Sólo avisarte de que últimamente hay alguien (la antigua presentadora del "Kutreshow" del Euskal Jai) que quiere darte una bofetada para romperte el útero. Bueno, en los juzgados ya ha reconocido que era una forma "poética" de expresar su disgusto por lo del Euskal.
Tú sigue sonriendo.
Y recibe, no ya de mi parte y de mi familia, no sólo de todos los que te han votado, sino también de una inmensa mayoría de quienes no te hemos votado, un tsunami de besos y abrazos en agradecimiento por los 12 años durante los cuales hemos tenido el privilegio de que hayas sido nuestra alcaldesa.

Patxi Mendiburu Belzunegui
Pamplona, domingo 22 de Mayo de 2011
a las 20:01 horas

P.D. Se me olvidaba. Yo también quiero dedicarte una canción. Mejor, tres. Son trocitos de tres canciones que compartimos; que te gustaban en tu época de estudiante y que a mí también me siguen gustando porque, como una vez me dijiste, abren, ganan espacios a la libertad:

jueves, 19 de mayo de 2011

Los vencedores y los vencidos

Salvador Ulayar, ante la puerta de su casa pintada ("Fuera los conquistadores españoles") por "patriotas vascos" en Etxarri-Aranatz (Navarra), donde ETA asesinó a su padre en 1979

Caminamos estos días por el filo de la Historia. Y de cómo gestionemos los acontecimientos que nos está tocando vivir dependerá en buena medida la calidad de la sociedad que dejemos a quienes vengan detrás. En esa sociedad posterior a ETA por la que todos suspiramos debe haber vencedores y vencidos. Como diría Joseba Arregui, sólo de ese modo la “narrativa de la Historia” hará justicia al pasado que hemos padecido, y permitirá que las futuras generaciones afronten con garantías el futuro.

Lo que parece claro es que la hipoteca tan brutal que ha extendido ETA sobre el conjunto de la sociedad española no puede cancelarse de un día para otro como si aquí no hubiera ocurrido nada. Estamos hablando de 850 muertos, de decenas de secuestrados, de cientos de heridos, de miles de familias que han convivido durante décadas con el miedo, con la extorsión, con la impotencia. Estamos hablando de un éxodo terrible y silencioso. Estamos hablando de pueblos y de barrios que no conocen la libertad, de una multitud de ciudadanos que todavía hoy no pueden decir lo que piensan, a veces ni en su propia casa. Muchas veces nos hemos recordado a nosotros mismos que todo ese sufrimiento podía tener algún sentido; que tanta sangre derramada serviría para algo si los vivos manteníamos el recuerdo y los ideales de los asesinados; que aún había esperanza si impedíamos que los terroristas y sus secuaces pudiesen imponer el proyecto político que les llevó a poner las bombas y a emplear las pistolas. Es verdad que las cosas han ido mejorando, y que las fronteras están hoy más claras que hace unos años, y que buena parte de la sociedad se ha sacudido el miedo. Sin embargo, muchos tienen la impresión de que hoy existen más motivos que nunca para la desesperanza.

Es preciso que haya vencedores y vencidos, sí, pero, como ya han dicho y han escrito otras personas, quizá resulta que los vencidos somos nosotros –los demócratas, los amantes de la libertad, los que hemos llorado a los muertos-, y que los vencedores son ellos, los que ahora van a volver a los ayuntamientos, los que van a sanear con dinero público su maltrecha economía, los que ya disponen del censo electoral para seguir intimidando a cualquiera que no piense como ellos. No hay más que observar las celebraciones que siguieron al pronunciamiento del Tribunal Constitucional: mientras los vivos nos estremecíamos frente a la pantalla que nos dio la noticia, aquellas primeras reacciones ya fueron como nuevas paletadas de tierra sobre las tumbas de los muertos. “¡Qué solos se quedan los muertos!”, se quejaba hace años Pilar Ruiz, la madre de Joxeba Pagazaurtundua, a Patxi López, el actual lehendakari. Es verdad: qué solos se quedan, especialmente ahora, cuando hasta cabría pensar que su muerte no ha servido para nada. O peor aún: ha servido para que los verdugos puedan presentar con toda normalidad su proyecto político, como si fuera razonable y legítimo defender unas propuestas que están escritas con la sangre de cientos de inocentes. Pero sí, hay que convenir que, en alguna medida, ETA lo ha conseguido. Para ellos sí que han tenido sentido estos últimos cincuenta años. Qué paradoja tan terrible que el etarra Errandonea agite risueño una pancarta de Bildu al salir de la cárcel mientras las víctimas de sus compinches digieren la humillación en la soledad de sus hogares. ¿Quiénes son los vencedores y quiénes los vencidos?


No puede darnos igual que en los escaños que hace no mucho ocupaban tantos concejales o parlamentarios que se jugaron la vida –y que en algunos casos la perdieron- se sienten dentro de pocos días los que celebraron su muerte. Algunos jueces seguirán creyendo que “no están contaminados”, pero ya se encargarán los acontecimientos de deshacer sus dudas. Los vivas a los presos que se han escuchado en varios actos electorales o la foto de Errandonea son sólo un anticipo de lo que se avecina. Hay antecedentes copiosos como para no esperar otra cosa.

Este es el triste panorama que nos espera a partir del 22 de mayo, con independencia de cuáles sean los resultados. Es grave que quienes han contemporizado con la actividad criminal de ETA se presenten a las elecciones. Y no es una exageración hablar en estos términos: basta con recordar las afirmaciones que hizo sobre Bildu el ministro del Interior antes del fallo del Constitucional. Por ejemplo: “Siempre dije que la ilegalizada Batasuna tenía que romper con ETA para regresar al juego democrático y, según el Tribunal Supremo, esto no se ha producido con la suficiente claridad y por eso todavía se le dice que no. Hay que demostrar que la ruptura es total y definitiva y eso no se ha hecho todavía”. En fin. Es muy grave que se presenten y que salgan elegidos, pero aún sería más ignominioso que alcanzaran responsabilidades de gobierno en ayuntamientos o en donde sea. Nadie debería tenerlos en cuenta en sus cábalas electorales ni en los posibles pactos posteriores al 22M. Lo contrario –tratarlos como si fueran un partido más– sería la derrota definitiva. ¿Estaremos a la altura de la Historia?

Pilar Aramburo
Ana Caballero
Rafael Doria
Ramón Ibarrola
Chon Latienda
Rodrigo Lería
Patxi Mendiburu
Salvador Ulayar
Cecilia Ulzurrun

domingo, 15 de mayo de 2011

Ya se van los pastores... Campesinas y pastoriles

Quiero recoger en esta entrada algunas canciones de pastores y campesinos que escuché de niño, que apenas si se sujetan en mi memoria y que hoy me llenan de nostalgia.
Ya en su día presenté "Remendé" o "Paloma del palomar", canción de origen asturiano, que cruzó el charco y luego nos volvió de la mano (nunca mejor dicho) de Víctor Jara y el conjunto chileno Quilapayún y del dúo argentino Leda y María.
Hoy os presento estas cuatro maravillas:

1. Ya se van los pastores
Se trata de una antiquísima canción extendida por toda el área de la trashumancia.
El registro más antiguo de "Ya se van los pastores" en la Biblioteca Nacional es en el "Cancionero musical popular español", recopilación de Rodolfo Halffter, compositor, miembro del Consejo Central de la Música de la República Española.
También aparece en la recopilación de Eduardo González Pastrana de 1935 titulada "La montaña de León. Cien canciones leonesas".
Siendo una canción de trashumancia, es casi imposible garantizar su origen exacto. Lo menos arriesgado es decir que su origen está en la amplia zona de la trashumancia española. 
La Rioja (escuchad el carrillón en El Espolón), y más concretamente Sierra de Cameros, también se atribuye su origen:

En la Sierra de Cameros (cuando era Castilla la Vieja) ve también su origen Joaquín Díaz.
Recientemente la BNE ha subido esta deliciosa interpretación de Victoria de los Ángeles (búscala en la cara B, 2ª mitad), soprano, con acompañamiento de guitarra por Renata Tarragó, en el años 1951, donde la atribuyen a Soria.
Pero si alguna provincia tiene más posibilidades de ser cuna de tan hermosa canción, ésa es León, ya que en ambas recopilaciones viene citada como "canción leonesa".
También Gonzalo Arenal (gracias, Eugenio Zaldo) hizo una armonización de esta bella melodía. Pero, aunque en el enlace se le atribuye a Gonzalo Arenal la autoría, sirva este otro, de 1897, anterior a su nacimiento, para mostrar que lo que hizo fue una armonización
Os la presento, con un mínimo acompañamiento, interpretada por Leda y María:

Ya se van los pastores
a la Extremadura;
ya se queda la sierra
triste y oscura.
Ya se van los pastores
hacia la majada;
ya se queda la sierra
triste y callada.
Ya se van los pastores,
ya se van marchando;
más de cuatro zagalas
quedan llorando.
Lucerito que alumbras
a los vaqueros,
dale luz a mi amante,
que es uno de ellos.
Lucerito que alumbras
a los pastores,
dale luz a la prenda
de mis amores.
Ya se van los pastores
volverán cantando
los amores que dejan
ahora llorando

Paladeando palabras: si el origen de la palabra "majada" es el que da la Real Academia (que coincide con el de Corominas), entonces "majada" es etimológicamente "un lugar cerrado con una malla". Lo mismo que "redil" es "un lugar cerrado con una red". "Red", en vasco, se dice "sare" y "majada" es "saroe", "saroi". Al sur de Pamplona tenemos el Sario, majada en la que en el siglo XIX pastaban los toros para las corridas de San Fermín.

2. Vivan los aires morenos
Canción popular extremeña. Todos los lugares que en ella se citan son de dicha Comunidad.
He tenido la suerte de encontrar esta preciosa canción, además bailada como "Jota de Campanario":

Vivan los aires morenos
que vienen de Guadalupe,
que pasan por Castilblanco
y van a Herrera del Duque.
¡Cuchichí, ole ya!
Que esta jota no me agrada
¡Cuchichí, ole ya!
Que ha venido de Miajadas
¡Cuchichí, ole ya!
Que esta jota no es de aquí,
¡Cuchichí, ole ya!
Que ha venido de Almoharín.
La Virgen de Guadalupe
es un poquito morena,
y el niño que lleva en brazos
todo se parece a ella
Desde hace no mucho tiempo, cuando oigo 'que pasan por Castilblanco', se me empañan los ojos recordando la inmensa hombría del cura navarro Ambrosio Eransus, párroco en los 40 de Castilblanco,  que le dijo al mismísimo Gómez Cantos: "Oye, tú, si molestas a algún vecino, te busco y te pego un tiro" (pincha en el enlace, no te arrepentirás).

3. Molinero, molinero (desde que vino la moda)
Esta canción campesina la escuché también de niño pero sin los añadidos de la versión gallega (El molondrón). 
En la prensa histórica la primera aparición (1924) es como canción montañesa y dicen "pañolitos".
La he encontrado cantada por soprano y tenor, pero, a mi juicio, lo que gana en calidad, lo pierde en naturalidad. Así que esta es mi oferta:

Desde que vino la moda,
que sí, que no, que ¡ay!
de los pañuelicos blancos,
me parecen los mocicos,
que , que no, que ¡ay!
palomicas en el campo.
Molinero, molinero,
a la hora de maquilar,
ten cuidado con la rueda,
no se te vaya a parar,
no se te vaya a parar
y te vaya a coger.
Molinero, molinero,
deja a la rueda moler.
Toditos los molineros,
que , que no, que ¡ay!
cuando salen del molino,
parece que van diciendo,
que , que no, que ¡ay!
de la piedra sale el trigo.

4. Cantan alegres rondallas
Actualización 01.02.2022
Esta canción ha quedado satisfactoriamente recuperada en Canción del Albergue de Vera de B.

Así la titulo porque, aunque empieza antes (y continúa después), desde ese punto la recuerdo.
En esta canción soy yo quien pide ayuda a quien la conozca. En casa se recuerda poco más de lo que aquí se ofrece. Así que, si sabes de alguien que pueda echar una mano, déjame tu comentario, correo, mensaje... que será muy agradecido:

...cantan alegres rondallas
de la plaza a la pradera.
De Castilla y de Galicia,
de Asturias* y Aragón,
de Extremadura a Navarra
canta alegre el corazón...
*Ver comentario de Ángel

lunes, 9 de mayo de 2011

Seminario de Tudela, curso 61-62

En el Moncayo, 1º de Gramática del curso 61-62 (pincha para ver mejor)
Ya que en otra entrada anterior hemos visto la alegre, castiza y hermosa Semana Santa tudelana, vamos a permanecer en la capital de la Ribera recordando aquel curso 1961-62 que pasé a orillas del Queiles.
Aquí tenemos una imagen que guardo de aquel año. Esta foto ya ha cumplido 56 años. Estamos en el Moncayo, a 2315 metros de altitud. Se nota, ¿verdad? Hay cinco curas: Javier Garde (1), Jesús Armendáriz (2), Ángel Echeverría (3), Sebastián Sotés (4) y Alejandro Aguirre (5). Yo, en el círculo rojo, con cara de frío y sufrimiento.