sábado, 13 de julio de 2019

Origen del Riau Riau. Dos versiones

Mutilzarra ha sabido devolvernos el Riau Riau, secuestrado por los de siempre
Hasta ahora, para conocer el origen del Riau Riau, había bebido sólo de la fuente primigenia: el blog Premín de Iruña, de Javier Baleztena, hijo de Ignacio, el fundador de este entrañable acto. Pero el otro día, en la entrada "Feria de ganado SF 1917 (localización)", buscando ampliar la información sobre los sanfermines de aquel año, encontré en el blog "La Perla Sanfermines", una segunda versión, documentada en la hemeroteca de la época.
Veamos ambas versiones:

1. Versión Baleztena y Mutilzarra
Blog Premín de Iruña
Todo ocurrió en la Marcha a Vísperas de 1911. Al finalizar la primera estrofa del Vals de Astráin, Ignacio Baleztena, en signo de aprobación hacia lo bien que la había dirigido su amigo Silvanio Cervantes (quien, además, le hacía todas las partituras: "Uno de enero, dos de febrero...") finalizó la misma gritando "¡riau riau!". Fue el 06.07.1911, poco después de las 16:00h.
Lejos de hacerlo con ánimo de ofender, Ignacio Baleztena quiso rematar tan bella pieza de forma espontánea y alegre, con este grito con el que se finalizaban las canciones festivas en la zona de Leiza (o de la Ribera: "Las vacas del pueblo ya se han escapau, riau riau..."). 
A algunos les hizo gracia la intervención, y especialmente al maestro Cervantes, que tuvo que reprimir una carcajada. Otros la vieron como una gamberrada. Pero, para sorpresa del público y del propio Baleztena, las siguientes estrofas fueron coreadas también con el grito "riau riau" por sus amigos de la Peña de los Mutilzarras (mozos viejos, solterones) del Café Kutz y cada vez por más gente, con indignación de los hombres serios y sesudos que lo veían como un despropósito y una falta de respeto.
Así de sencillo surgió el primer Riau Riau.
Nota: todos estos datos están extraídos del blog Premín de Iruña (uno de los seudónimos de Ignacio Baleztena) y contados por su hijo Javier Baleztena

Carta de los lectores
El 8 de julio de 2014 Diario de Navarra publicaba una "carta de los lectores" de Javier Baleztena, con el título de "El Riau Riau cumple cien años", en la que detallaba estos pormenores y añadía: "Así continuó creciendo el espontáneo y popular acto (del 06.07.1911)  hasta que saltó a la fama (es decir a la prensa) en 1914: "Cerraba la marcha la banda del regimiento de América que tocó el clásico vals, coreado por muchísimos jóvenes que daban acompañamiento y escolta al Ayuntamiento”.

Peña Mutilzarra: Premio "Riau Riau"
El seis de julio de este año 2019 la Peña Mutilzarra entregaba a La Pamplonesa el Primer Premio "Riau Riau" en el zaguán del Ayuntamiento pocos minutos antes de dar comienzo al tradicional Vals de Astráin. 

2. Versión blog "La Perla Sanfermines"
Entresaco de dicho blog los datos referidos al tema del Riau Riau

1916
Las fiestas de este año arrastraron numerosas críticas por el comportamiento de algunos mozos; el día 6 un grupo de señoritos vociferó palabras malsonantes en la mismísima Plaza Consistorial.

1917 Bando restrictivo (1º)
Demetrio Martínez de Azagra
Después de lo sucedido el año anterior, el nuevo Alcalde, con el apoyo de la prensa pamplonesa, decidió aplicar toda su autoridad con el fin de sanear la fiesta, evitando excesos y espectáculos lamentables. Un duro bando municipal puso fin, al menos durante estas fiestas, a determinadas anomalías detectadas el año anterior, aunque justo es decir, en honor a la verdad, que aunque el Ayuntamiento consiguió su objetivo, el ambiente callejero quedó enrarecido y encorsetado. Algún periodista llegó a pedir un mayor grado de permisividad.
El año anterior un grupo de mozos había irrumpido en las vísperas entorpeciendo el paso de la corporación y coreando el tradicional Vals de Astrain, finalizándolo con un sonoro ¡riau riau!. Se entendió entonces como una falta grave de respeto hacia el Ayuntamiento, hacia los músicos y hacia toda la ciudad. 
En vista de ello, ante la inminente llegada de las fiestas de 1917, el Alcalde anunció la sustitución del conocido vals por otra pieza, idea ésta que fue rechazada por la prensa influyente. Es así como la alcaldía sacó un bando prohibiendo, entre otras cosas, corear el Vals de Astrain. Este año, no se cantó ¡riau riau!
Bando
Don Demetrio Martínez de Azagra, alcalde Constitucional de esta ciudad (Junio de 1917 - Diciembre de 1917).

1º.- Que cuando el Excmo. Ayuntamiento se dirija a la iglesia de San Lorenzo la víspera de San Fermín, deberá el público, tanto a la ida como a la vuelta de la comitiva, dejar desembarazadas las calles del tránsito, absteniéndose de formar grupos que vayan tumultuosamente delante de la comitiva, así como corear la música.

1918 Bando restrictivo (2º)
Por segundo año consecutivo las fiestas estuvieron precedidas de un duro bando, que no ofrecía grandes diferencias respecto al del año anterior. Esto permitió que tampoco en estas vísperas los mozos cantasen ¡riau riau! cuando la banda interpretaba el Vals de Astrain; además, Ignacio Baleztena, de quien se dice que fue el autor de esta ocurrencia, estuvo ocupado aquella tarde del día 6 portando la bandera de la ciudad (en 1918 fue elegido concejal del ayuntamiento de Pamplona por la Comunión Tradicionalista).
HAGO SABER: Que proponiéndome reprimir enérgicamente toda manifestación de incultura o acto inconveniente que en desdoro del renombre de esta ciudad se produzca en las próximas fiestas, perturbando el orden u ofendiendo el decoro público, he dispuesto:
Viernes Santo 1918, también de abanderado

1919 Sin bando restrictivo
La alcaldía no sacó ningún bando restrictivo, como había sucedido los dos años anteriores.
Las vísperas asistieron, como acto, a su primera convocatoria realmente multitudinaria. Se hablaba de varios miles de personas concentradas en la Plaza Consistorial y calles adyacentes; el gentío apenas podía revolverse en la plazuela Consistorial y a lo largo de la calle Mayor (“Diario de Navarra”, 7 de julio).

1920  La Pamplonesa
Algo se movía en la ciudad. Algo estaba cambiando. No hay más que fijarse en las vísperas; pues en tan sólo dos años se había pasado de prohibir corear el Vals de Astrain a ver este acto como un síntoma saludable de participación popular. Por fin los mozos podían corear tranquilamente, sin miedo a sanciones, la popular pieza titulada “El seis de julio” (en 1928 se le añadió la letra, escrita por María Isabel Hualde Redín, que empieza "A las 4, el 6 de julio" ). Por fin, la alegre mocina podía entonar su¡riau riau! Estas dos palabras habían dejado de ser una falta de respeto.
En aquellas vísperas, 'soportando' aquél primer ¡riau riau! autorizado, participó una nueva banda de música, de carácter civil, que se hacían llamar La Pamplonesa.

Conclusión
Atrio Catedral Baleztena con sus Gigantes
Como veis, hay dos diferencias bien claras
1. El año. 
Javier Baleztena calcula que fue en 1911 cuando empezó a corearse con el grito de "riau riau" el final del Vals de Astráin y aporta como documento el Diario de Navarra del 7 de Julio de 1914 en el que se dice que "el vals fue coreado por muchísimos jóvenes que daban acompañamiento y escolta al Ayuntamiento”
Para el blog "La Perla Sanfermines", fue en 1916 cuando se empezó a corear con un sonoro ¡riau riau! el final del Vals

2. El carácter
Terrible el trabajo de los municipales
Para Baleztena, rematar el vals con un riau riau era una forma festiva de aprobación, que sólo indignó al personal más serio y sesudo. De hecho, Silvanio era el amigo de Ignacio que le hacía las partituras. No había ánimo de ofender y menos de entorpecer el paso de la Corporación.
En La Perla, en cambio, la prensa mojigata de la época considera gritar "¡riau riau!" como "palabras malsonantes" y se presenta la actitud de los mozos como de entorpecer el paso de la Corporación.

Sea como fuere, me quedo con que "en tan sólo dos años se había pasado de prohibir corear el Vals de Astrain a ver este acto como un síntoma saludable de participación popular".
Gracias al gesto espontáneo de Ignacio Baleztena.
Para ver los avatares posteriores de tan entrañable acto, pincha en Wikipedia.

No hay comentarios: