sábado, 13 de agosto de 2016

Como ciervos sedientos que van hacia la fuente


Como ciervos sedientos...
Popularmente se conoce por su comienzo, "De rodillas", al Himno Oficial del XXXV Congreso Eucarístico Internacional, celebrado en Barcelona, en 1952. Pero yo, por motivos que luego veréis, he preferido llamarlo como dice el título.
Cualquier persona nacida antes de mediados de los años 50 seguro que la conoce. Luego, con la llegada del Vaticano II, desapareció -como otras muchas- de los cantorales habituales.
Quien ha subido el vídeo y la información a YouTube es OscarReflexiO, la misma persona que ya nos dejó alucinados en una entrada anterior dobre Melodías Populares Religiosas por su excelente buen hacer. Vuelvo a felicitarle por su impecable trabajo.
Gracias a esta información he podido saber que esta canción religiosa y muy popular, y que tanto me agradaba de niño (por cierto, hoy me he enterado de que el comienzo es "De rodillas, Señor, ante el Sagrario"; yo, hasta hoy mismo, siempre se la he cantado a la Virgen: "De rodillas, Señora del Sagrario". Y nunca nadie me ha corregido) he podido saber -decía- que el autor de la letra es, nada menos, que José María Pemán, el poeta oficial del franquismo.
Más de mi agrado ha sido conocer que los intérpretes del disco, grabado en 1964, son la Escolanía ‘’Virgen del Camino’’ del Santuario de la Virgen del Camino, PP. Dominicos de León. Y que uno de los solistas es Máximo Oloriz, quien ya salió en Desolvidar con motivo del Himno a Pamplona.
Con los Dominicos de León estudió también mi compañero de Departamento, durante 20 años, Luis Carlos Rueda Estrada, también muy buen músico, a quien también quiero dedicar este vídeo en el que he incluído algunas imágenes de quienes fueron antiguos alumnos en los Dominicos.



Las razones de este vídeo
¡Increíble! ¿Verdad? Ya me disculparéis esta pequeña broma, pero esta mañana, cuando he visto el vídeo que ha colocado en mi muro Tschurt Sanna -con un San Eustaquio incluído-, inmediatamente ha despertado en mis recuerdos esta preciosa canción que habéis escuchado, y no he podido resistirme.
Lo más curioso es que la iglesia en la que entró el ciervo -un 23 de Julio de 2014- es la iglesia de San Eustaquio, en París. Si os habéis fijado, preparando la sorprendente entrada del ciervo, hay dos imágenes en las que se muestra la leyenda de San Eustaquio (o San Huberto), general romano  que, convertido al cristianismo, fue martirizado en Roma. Según la leyenda, estando de caza se le apareció un ciervo que llevaba un crucifijo entre sus cuernos y se oyó una voz que le dijo que por qué le perseguía. A partir de ese momento, se convirtió al cristianismo. Es el patrón de los cazadores.
Ése ha sido el motivo por el que me ha parecido oportuno incluir en esta canción tan solemne este vídeo rompedor, aprovechando la letra y siguiendo un poco una antigua costumbre pamplonesa de meter avecillas en las iglesias. Por ejemplo en el Octavario a la Virgen del Camino solían colocar en la cúpula de la Capilla dedicada a la Farandulera un montón de jaulas con jilgueros y ruiseñores para que acompañaran al tiple, y así dar mayor verismo a la aparición de la Virgen encima de una viga.
Y si la Virgen del Camino tenía ese derecho, el patrón de los cazadores no iba a ser menos.

3 comentarios:

charo Fuentes dijo...

Lo recuerdo, era yo pequeña, pero entonces las cosas religiosas presidian la vida

Elisa Urtasun dijo...

Me ha gustado mucho,y he disfrutado con el vídeo y el cántico

Anamary Olaverri dijo...

Ya lo creo que lo recuerdo. Lo canté muchísimas veces, tanto en el cole como en la parroquia. Gracias por desolvidarlo. La estrofa de los ciervos no la había oído.