jueves, 20 de agosto de 2015

Ya falta menos para Santa Criz (Eslava)

Años 1998-2000: no se veían aún rastros de excavaciones (pincha: gana mucho)
Descubriendo... 
Corría el año 90. Eran mis primeros meses en Gallipienzo, y dedicaba todas las mañanas a explorar las maravillas naturales y humanas del término y de los alrededores.
Aquella mañana, bien tempranico, había salido de mi casa, en el pueblo antiguo, camino de Beragu y, siguiendo la cresta (San Pelayo, Zaldinaga...) en dirección oeste, encontré una diminuta senda que me permitía ir, monte abajo, en dirección a Eslava, para luego volver por el arroyo Indusi hasta el puente Melenas, y desde ahí al pueblo.
Pues bien, una vez bajado Beragu, me llamó la atención una doble colina (en el rosario de cerros que va desde el puente Melenas hasta Lerga) que parecía tener un torreón, de piedras muy oscuras, en el centro. Me desvié de mi ruta para subir hacia allí.
Según subía iba encontrando piedras que no parecían naturales. Cada vez más grandes. Notaba que estaban talladas por el hombre. ¿Pero, qué era aquello? Era una maravilla: encontré unas losas inmensas, con unas letras bien claras. Era latín. Me emocioné cuando conseguí leer y entender unas cuantas palabras. No cabía ninguna duda: ¡había encontrado una ciudad romana! Algo de lo que nadie me había hablado.
Presa de la excitación, aceleré el paso por una pista muy ancha para llegar lo antes posible al pueblo y contar el hallazgo (en aquella época no había móviles).

...el Mediterráneo
En la pista, pasado un estrechamiento, había un letrero muy grande cuyo contenido no podía aún leer ya que miraba hacia el norte. Cuando llegué a su altura descubrí... lo gilipollas que puede ser uno: "Ciudad romana de Santa Cris (sic). Diputación Foral de Navarra. Patrimonio arqueológico", rezaba aquel humillante letrero.
En mi descargo diré que en aquella época (1990) no había ni rastro de excavaciones.

(pincha: disfrutarás y leerás mejor)
DN Pamplona
La majestuosa ciudad que los romanos construyeron a finales del siglo I antes de Cristo en Eslava (valle de Aibar) y que las excavaciones han descubierto podrá visitarse en unos meses. Se van a adecuar recorridos e instalar información.
2008: diferentes épocas
Quedan solo unos meses, como mucho hasta principios del año que viene, para poder apreciar lo que se ha podido descubrir de la ciudad majestuosa que construyeron los romanos que llegaron a Eslava, en el valle de Aibar, a finales del siglo I antes de Cristo. Y es que este otoño está prevista la finalización de las obras de consolidación de la ciudad romana de Santa Criz, considerada la mejor conservada de Navarra, para que a finales de año o comienzos de 2016 se pueda musealizar, es decir, adecuarla con recorridos, instalar información y exhibir las piezas recuperadas, además de redactar la memoria de las excavaciones.
El yacimiento romano de Santa Criz permite además que en Navarra se encuentre la segunda necrópolis (el lugar donde se enterraba a los vecinos de esta ciudad romana) excavada en la Comunidad foral tras la de Iturissa de Espinal.
Los datos aportados por la cultura material apuntan a una cronología julio-claudia (en torno al cambio de era, durante los mandatos de Augusto-Tiberio) para el inicio de la construcción, si bien hay también datos que demuestran el inicio de la ocupación en época tardorrepublicana (comienzos del siglo I a.C.). 

Primera noticia, de 1917
La primera noticia sobre la ciudad romana de Santa Criz es de 1917, el hallazgo de un miliario. No obstante, durante casi un siglo no se trabajó allí en profundidad, dándole el impulso que merecía y haciéndole resurgir. Pero todavía quedan muchas incógnitas en torno a este yacimiento: 
¿Qué pasó ahí a finales del siglo I antes de Cristo? ¿quiénes estaban? ¿quiénes llegaron? ¿cómo lo hicieron? ¿por qué construyeron esta ciudad tan grande? ¿qué nombre tenía? ¿por qué la abandonaron? 
Las respuestas siguen bajo tierra. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Anda que si llegas a ser tú el descubridor... menudo puntazo. Te habrías convertido en el Sautuola de esta nuestra Comunidad Foral. Pero no se puede llegar a todo. Nada más que como infatigable artífice de las continuas y excelentes producciones de la factoría "Desolvidar" ya tienes asegurado un lugar de honor en el Parnaso navarro.
Pues otro navrazo lúdico-cultural (ahora igual habrá que decir nafarroabrazo)
JJM