Leí ayer en el Diario de Navarra una bonita noticia de una madre muy agradecida al voluntariado de ANFAS porque gracias a esas personas su hijo había podido pasar una semana de vacaciones (para el hijo y para su familia, que también descansa).
En esa carta se destaca especialmente el papel que jugó la voluntaria que atendió a Mario.
Desolvidar, tras una ardua investigación, ha conseguido saber quién fue esa monitora y ha decidido sacarla del anonimato. Es, nada menos, que mi sobrina Garazi.
¡ENHORABUENA, CAMPEONA!