lunes, 15 de marzo de 2010

Tarde de otoño en Platerías (habanera del ochocientos)

Café Iruña, en la Plaza del Castillo de Pamplona
Hay comentarios bonitos. Pero algunos... me resisto a dejarlos al final. Es el caso del de Henri-Pierre, justo unas horas antes de que acabe el otoño de 2011 (¡Ay, tarde de otoño llena de sol de Madrid!)...:
"Henri-Pierre dijo...

Mi niñez.
Gato de madre francesa.
Ese cantar lo cantaba mi padre.
Nunca se marcharon de mi mente ni la musica ni la evocacion de la infiel vestida de gris
Siempre me desgarra el alma y siempre me atrae, me fascina.
Hubo plaza Santa Ana un comedor que volvio a reconstituer el ambiente de Platerias y que Platerias tambien se llamaba.
Fui un cliente fiel y alli ma llamaban "el señor frances que habla español".
Siete años sin volver en Madrid, ese Platerias tambien a desaparecido.
Volado con la paloma que libera Federico Garcia Lorca ?
No se pero que pena me dio.
De tanto mover las caderas Madrid estara olvidandose de su alma ?
Gracias por ese homenaje al Madrid de siempre y a quien tanto le gusta y le conmueve.
Henri-Pierre, el que fue Kike
Perdon por mi castellano tan torpe"

Podéis ver aquí su preciosa entrada


*****
En la investigación para mi última entrada sobre Gayarre me topé en varias ocasiones con una nostálgica canción que habla del Madrid de fines del XIX y, explícitamente, de las actuaciones del tenor navarro en el Teatro Real de Madrid. Su título es curioso: "Tarde de otoño en Platerías", de Aguilar, León y Solano.
(pincha para leer mejor)

Se trata de una canción que ya la escuché hace unos 20 años, en el café Iruña de Pamplona, a un par de cuarentones. Ponían mucho énfasis cuando llegaban a eso de "Alfonso XII volvía de los toros. Julián Gayarre cantaba en el Real...". Me llamó mucho la atención porque era una canción distinta de las que habitualmente se cantaban entonces y porque tenía pinta de ser muy antigua.

Ahora me he enterado (BNE, ca. 1944) de que fue en los años 40 y 50 popularizada por García Guirao. Y, mucho después, cantada por el Consorcio y por Emilio Carretero. Aquí, en la BNE, la podéis escuchar con el nostálgico sonido del vinilo en una grabación del de Moratalla, de 1944?

 A. Begué (1900) "Café de Platerías". Ell mismo lugar hoy
La acción nos sitúa a principios del siglo XX y nuestro protagonista evoca un fugaz encuentro con una mujer en el café Platerías de la calle Mayor de Madrid en los años 80 del siglo anterior, cuando Alfonso XII se llevaba muy bien con Frascuelo y Lagartijo y Julián Gayarre cantaba en el Teatro Real.

Aquel café Platerías fue un lugar, como tantos otros del Madrid de comienzos de siglo, en el que se celebraban apasionantes tertulias donde los consagrados de la Generación del 98 iban abriendo su círculo a los jóvenes artistas y literatos de la del 14.

Yo me imagino a aquel hombre de la canción solo, lamentando aquello que pudo ser y no fue. Un poco, como Antonio Machado en el café Salesas, o en el Europa, donde solía esperar a su hermano Manuel: recordando con nostalgia a su recién desaparecida Leonor. Ella sí que fue, ¡pero tan breve!

Aquel siglo se fue muriendo, como moría la tarde en los espejos. Y, como el tiempo, aquel amor antes de nacer.
TARDE DE OTOÑO EN PLATERÍAS
Antonio Aguilar de Mera, Alejo León Montoro, Juan Solano.
(Ver comentarios del 17 y 18.07.12)
Canta García Guirao

La tarde clara
de otoño madrileño
que en Platerías
tomaba yo café,
con tu vestido gris
entrar en el salón te vi.
Y, al verte tan bonita,
me puse junto a ti.
La tarde moría en los espejos,
soñaba el amor en los divanes
y todo yo temblé
en el momento aquel, mi bien,
que, todo ruboroso, mi amor te declaré.


¡Ay tarde de otoño
llena de sol de Madrid!
Café de mis sueños
donde el amor encontré.
¡Ay 1800, qué lejos ya estás de mí!
Todo pasó como una luz
que yo apagué.
¡Ay tarde de otoño
llena de sol de Madrid!
Alfonso XII volvía de los toros,
Julián Gayarre cantaba en el Real.
Y yo en aquel café,
gustoso te cité, mi bien,
y en sueños de ilusiones
inquieto te esperé.
Las luces de gas iban creciendo.
La noche llegaba lentamente.
Y, al no verte venir,
creyéndome de amor morir,
me fui de Platerías
pensando sólo en ti.

Actualización 20.03.12 A petición de algún comentarista, incluyo la versión de Emilio Carretero:



Y terminamos con una primorosa interpretación, la del Consorcio:

33 comentarios:

Júlia dijo...

Preciosa canción, me encanta, es tan evocadora...

Anónimo dijo...

Pues yo, Patxi, no veo la canción por ningun sitio
Ramon. (El chico de los ojos bonitos)

Anónimo dijo...

para el chico invidente (y bastante tonto)de los ojos azules:la letra está dividida en dos trozos por un rectángulo negro en cuyo ángulo inferior izquierdo hay un triangulito que es el "play". Pulsa y disfruta, so ceneque

Júlia dijo...

Seguro que después volvió a encontrar a la del vestido gris y fueron felices.

desolvidar dijo...

Siento contradecirte, Julia, pero no se volvieron a encontrar. Si así fuera, no habría habido canción. Gracias por tu comentario

Anónimo dijo...

Recuerdo perfectamente oír esta canción en los años 40 pero ahora me gusta mas que antes. Es maravillosa y, ademas, retrata ese otoño lleno de luz de Madrid.

desolvidar dijo...

Gracias, anónimo comunicante de esta tarde tan fría del 16 de diciembre, pero llena de luz de Madrid, de Pamplona...
Gracias por un comentario tan bonito.
Gracias por recalar en este viejo puerto de la nostalgia.
Gracias

Anónimo dijo...

Gracias amigo Patxi por permitirnos desolvidar esta maravillosa canción.

Recuerdo escucharla de pequeño, especialmente ese estribillo... "Ay tarde de Otoño llena de sol de Madrid...".

La he vuelto a escuchar ahora cuando, por casualidad, la encontré en Internet cantada por El Consorcio. Me recordó tanto mi niñez que, buceando por la red, he dado con tu página y no me resisto a poner mi comentario.

"Ay 1940 que lejos ya estas de mí"... aunque puedo seguir disfrutando de estas tardes de Otoño llenas de sol de Madrid y no desolvido esta canción. Espero que por algunos años mas.

Me encanta el comentario de Julia y su buena intención para que todo terminara bien.

Gracias Patxi, de nuevo, por permitirme escribir mi comentario en tu página, por prestarnos a los madrileños la imagen de vuestro maravilloso café para imaginar como habría sido el de Platerías y, sobre todo, por animarnos a todos a desolvidar.

Gracias, Patxi

Anónimo dijo...

Vaya por Dios, justo "olvidaba" darte también las gracias por incluir la versión de Emilio Carretero, creo que mejor que la de García Guirao aunque ésta, si la encontráis por Internet, tiene el aliciente de escucharse el ruido de la aguja sobre el disco de pizarra.

Gracias, Patxi

desolvidar dijo...

Buenos días, anónimo comunicante de esa hora mágica de las 3'30 de la madrugada. Ya veo que, como a mí, a ti también te atrapa la nostalgia al escuchar esta hermosa canción. Nostalgia por los años de infancia que, aunque se fueron, vuelven de vez en cuando y nos hacen un nudo en la garganta. Nostalgia de aquella primera cita, quizás en un café, con aquella chica de la que luego la vida te apartó...
Totalmente de acuerdo en lo que dices de Carretero. De hecho, antes de encontrar la versión de Guirao, sonaba en este vídeo la de Emilio. Y la cambié porque es más antigua la de Guirao y porque me cae muy bien este agricultor tan amable.
Gracias, amigo, por recalar en mi blog. Estás en tu casa
Gracias a

Henri-Pierre dijo...

Mi niñez.
Gato de madre francesa.
Ese cantar lo cantaba mi padre.
Nunca se marcharon de mi mente ni la musica ni la evocacion de la infiel vestida de gris
Siempre me desgarra el alma y siempre me atrae, me fascina.
Hubo plaza Santa Ana un comedor que volvio a reconstituer el ambiente de Platerias y que Platerias tambien se llamaba.
Fui un cliente fiel y alli ma llamaban "el señor frances que habla español".
Siete años sin volver en Madrid, ese Platerias tambien a desaparecido.
Volado con la paloma que libera Federico Garcia Lorca ?
No se pero que pena me dio.
De tanto mover las caderas Madrid estara olvidandose de su alma ?
Gracias por ese homenaje al Madrid de siempre y a quien tanto le gusta y le conmueve.
Henri-Pierre, el que fue Kike
Perdon por mi castellano tan torpe

desolvidar dijo...

Gracias por tu bellísimo comentario. Ocupará un lugar muy especial en mi entrada. Tu español es inmejorable (hace muchos años que ya no decimos "castellano"). Sólo un pequeño detalle sobre el título de tu post. Se llama la canción ( y tú bien lo sabes)"Tarde de otoño en Platerías" Y el verso que has elegido para titular no es "Hay tardes de otoño..." sino "¡Ay, tarde de otoño..!".
Lo dicho, Henri-Pierre, mil gracias por inundar de belleza y nostalgia mi entrada

Anónimo dijo...

No te conozco cafe de las Platerias pero mi infancia esta plena de tus recuerdos, quisiera poder atesorar todo con respecto a ti en mi facebook.

Henri-Pierre dijo...

De volver aqui es como dar cuerda a esas maquinitas de musica que tanto nos encantaban y cuyas notas fragiles y quebradas nos transporta en la mentira de una niñez glorificada por la nostalgia.
Envejecer es encender luces en tiempos remotos aunque al vivirlos eran menos luminosos

desolvidar dijo...

Volver con la frente marchita,
las nieves del tiempo
platearon mi sien...
Un abrazo, Henri-Pierre, desde el Café Iruña, en la Plaza del Castillo de Pamplona.
Sigo viendo con mucho agrado tus fotos en el FB

Florentino dijo...

Cuando era un chiquillo escuche esta cancion y me quedo grabado ese estribillo: '¡Ay tarde de otoño llena de sol de Madrid!'.
Entonces tenía 12 años. Ahora tengo 72 y toda mi vida estuve buscando esta cancion inutilmente. Pensé que era una pieza de zarzuela.
El otro día y por casualidad vi tu pagina web y encontré este tesoro que busqué durante 60 años, gracias a ti.
Tenia pensado que nunca la encontraria y ¡ya vés, aparecio por fin! y mi alegria es enorme.
Esta hermosa canción me ha emocionado, me ha llevado a los 14 años.
INTERNET y tú lo habeis hecho posible.
Gracias Patxi.

desolvidar dijo...

hola florentino: me alegra mucho haberte hecho feliz. 60 años buscando... Estoy convencido de que también echarás en falta esta canción de Pepe Guizar, Primavera, que a mí me ha llevado tan solo 22 años encontrarla. O la vieja radio de dormitalería...
No tienes más que escribir en Google:
Desolvidar Primavera
Desolvidar Dormitalería
Y aparecerán canciones de aquellos años en los que éramos niños.
Un abrazo. Aquí tienes tu casa

Anónimo dijo...

Buenas tardes a todos. La cancion la escribió Antonio Aguilar, que si bien nació en 1904, conocia bien Madrid y supo reflejar ese fin de siglo XIX en su cancion. Los arreglos se los hizo el Maestro Solano. Gracias por la pagina y los comentarios que me han gustado mucho.

desolvidar dijo...

estoy de vacaciones en la bella y brava Asturias y muy distraído en los chigres de la playa de Vega de Ribadesella. Por eso no puedo entrar en grandes disquisiciones sobre autorías de esta bella canción, pero te agradezco en el alma tu comentario.

Anónimo dijo...

Aguilar era mi abuelo, y recuerdo en mi infancia como, frente al piano y en sus últimas "tardes de otono", llenaba con las notas de esta canción el salón de la casa, cuando el alzheimer ya habia invadido su mente, la melodia que creó pervivía en su interior...

desolvidar dijo...

mil gracias, nieto de Aguilar, por compartir tan emocionante vivencia. Un abrazo muy fuerte

Anónimo dijo...

Yo la oí en la radio, quizás en los finales años 40 o principios de los 50. En la década de los 60 la volví a oir en la vox de un amigo de mi edad.
hoy, aue se me ha ocurrido mirar en internet no la había vuelto a escuchar, salvo cuando yo mismo he cantado algunos fragmentos sueltos que recordaba.
Me hubiera gustado descargarla pero no he encontrado una forma sin que a uno le pidan algún dato y que no estoy dispuesto a fscilitar
Así que muchas gracias por esta satisfación de oirla y por los comentarios tan interesantes que he leido.

desolvidar dijo...

Anónimo del 1 de noviembre: Gracias. Si que puedes descargartela con, por ejemplo, "a Tube Catcher"

Henri-Pierre dijo...

Un momento de Soledad y de paz en el alboroto vano de la vida.
Una pausa en el kaleidoscopo de los desordenes prefabricados de nuestros dias.
Un instante de verdad volviendo en donde las frentes marchitas se ponen a lucir las ilusiones de los tiempos de antes.
Y aqui vuelvo, aun, a respirar los encantos desesperados de lo que fue y que añoramos tanto.
Clavastes un alfiler de tanta emocion Patxi, en la pelota cada sazon mas gorda, de los hilos de lo transcurrido, que aqui vuelvo a delectarme de venenos deliciosos.
Gracias...

desolvidar dijo...

Henri-Pierre: cada vez que recalas en este puerto de la nostalgia, me revolucionas el chiringuito con tu modo tan sentido de escribir. Precioso comentario.Gracias

Anónimo dijo...

Me parece un sueño, todo lo que he leído de este ultimo enlace, me recuerda tanto a mi madre! cuantas veces lo cantamos juntas y ella me enseñaba la letra que yo apuntaba con caligrafía de niña. y me gusta todo lo que cuentas: la mujer infiel que no apareció en Platerías, con su vestido gris.. En el video de Tarde de Otoño, sale la Cibeles y el Palacio de Comunicaciones, pues allí hay una ventanita donde yo dormía cuando venia a Madrid; mi tío fue quince años director General de Correos y Telecomunicaciones, y vivían allí. Era un palacio, y yo me asomaba de pequeñita con mi camisón largo a ver la Cibeles, y hoy al ver la ventana donde yo dormía en tu video he temblado de emoción. Que pequeño es el mundo! Amigo patxi .¿ quien me lo iba a decir, cuando yo, una niñita, dormía en esa habitación que ahora sale en el video de mi amigo
Alma

Henri-Pierre dijo...

Muchas gracias Patxi, pero sabes que se me pasa tanto el español que me parece siempre corto y torpe lo que digo. Pero mira, desde que me lo dejistes, no has notado que ya no digo "castellano" sino "español"
Hasta luego amigo

desolvidar dijo...

Hola, Henri-Pierre. Tu español es siempre perfectamente entendido y, sobre todo, muy apreciado. Mi afán de corregir (español por castellano) debe de ser por la deformación profesional de un viejo profe ya jubilado. Pero me alegra que hayas captado la diferencia. Te imaginas decirle a alguien que habla vasco, vascuence o euskera, decirle que habla vizcaíno?
Un abrazo

Anónimo dijo...

Yo conocí esta canción con unos intérpretes muy especiales. En Cintruenigo, hacia 1954. Los intérpretes citados se llamaban “Los trinos carboneros”, entre los que se encontraban “el pavo”, el Flaviano y “el calibre”. Da la casualidad de que “el pavo” se llama Enrique Abad, que unos años después se incorporó a Los Iruñako.
El recuerdo que tengo de esa interpretación es magnífico. Las voces, buenísimas, acompañadas de guitarras, resaltaban la belleza de la canción.
Fernando Carrilo de Albornoz

desolvidar dijo...

jajaja carboneros, no! “Los trinos cirboneros”, de Cintruénigo (Navarra). Aquí tenemos una buena información de sus componentes que confirma lo que dices. Gracias, Fernando, por tu comentario (y por el chiste) http://www.fundacionnc.org/wp-content/uploads/2017/11/200608-21.pdf

Jesús Enrique Martínez Díaz-Marta dijo...

Qué alegría. La canción la tarareaba mi padre. Vivimos en Cintruénigo en aquello años y se la oí cantar a Enrique Abad, "el pavo", cuyo padre tenía una fontanería al lado del magnífico cine Avenida propiedad de "los tambores". Mira por dónde se unen los dos recuerdos: La canción y los cirboneros.

desolvidar dijo...

Qué gozada recibir tu comentario, Jesús Enrique. Muchas gracias!

Jesús Enrique Martínez Díaz-Marta dijo...

No me des cuerda Patxi que te aburro.

MAESTROS: Las monjas de la caridad, con aquellas "alas", D. Sabino Iribarren,me formó, sobretodo, como ser humano. Navarro que ejercía como tal. Nobleza y sencillez.

AMIGOS: Desde Angel Ayensa (eminente médico en mi ciudad, Toledo) hasta Juan Maria Arias, hijo del gran médico, D. Nicolás.

ENTORNO HUMANO: Todo. Desde Milagrosa Cornago y Julián Chivite (nunca he vuelto a conocer personas como ellos) hasta los Ligues, los 0tero Navascues(el padre un sabio nuclear), los bodegueros Chivite (subí en, creo, un Fiat "balilla" que utilizaba Julián). D. Miguel el párroco, me enseñó latín como pudo, porque la materia prima dejaba bastante que desear y, un sacerdote, que cuando nos confesamos para hacer la primera comunión pegó una "hostia" a un niño que salió rebotado del confesionario. Nunca supimos el pecado que merecía tal penitencia.

ENTORNO SOCIAL: La Virgen de la Paz,yo la conocí "vestida", y la música que acompañaba a su novena, y sus "trenzas". Las fiestas de septiembre, nuestras primeras botas de vino. Los encierros, primeras emociones juveniles.

Muchas gracias por aguantarme, pero tú te lo has buscado, te lo advertí. Inmensas gracias.